COMENTARIO:

Imagen 07:30 hs

Desde el fin de semana pasado, las condiciones del tiempo han evolucionado hacia un patrón que se aproxima a lo esperado para la época. En primer lugar, el calor y la humedad se han hecho presentes en forma consistente, más allá de cambios temporarios de masa de aire. Los mismos promovieron alguna influencia sobre el ambiente, pero no dejaron enfriamientos fuertes como los que se habían manifestado hasta avanzados el mes de octubre. La persistencia de masas de aire de origen tropical ha aumentado la frecuencia de eventos pluviales y aun cuando los mismos no logren cobertura completa, al menos se nota un nivel de actividad propio del mes de noviembre. De todas maneras la demanda de lluvias sigue muy alta.

En la foto de satélite, se aprecia una línea frontal, la cual queda demarcada por la nubosidad que va de desde el norte de LP hasta el este de RN. Alguna nubosidad menor también afecta el sur de MZ y las vecindades de SL y CB, pero por lo pronto, LP y el oeste bonaerense, parecen las zonas con mayores posibilidades de cambiar por lluvias estas coberturas.

Durante las próximas jornadas, la perturbación frontal tenderá a avanzar en forma lenta desde el sudoeste hacia el noreste. Entre hoy y mañana, las lluvias se repetirán en el sudoeste de la región pampeana, posiblemente también avanzando sobre territorio cordobés y quizá el sur bonaerense. El resto de la región pampeana y el norte del país, se mantendrá dentro de un contexto más estable y con calor. Esto ayudará a promover tránsito de nubosidad, pero recién durante el domingo las lluvias lograrían generalizarse sobre la franja central del país y luego moverse hacia el norte. La influencia del centro de alta presión sobre el este, es todavía un condicionamiento para la dinámica de los sistemas frontales. Los mismos aun no son productivos en términos pluviales de manera generalizada. Se dan lluvias con una gran dispersión de volumen, más allá de que las coberturas de las mismas hayan logrado mayor extensión. Las señales de mejora están presentes, pero el tránsito hacia la regularización pluvial de la primavera no será un proceso sencillo. Se perfila la continuidad del ambiente de transición hacia el verano.