Commodities

Auspiciosa primera mitad de octubre para las liquidaciones de subproductos de soja

Guido D’Angelo - Alberto Lugones - Emilce Terré
En los primeros días del mes se generaron importantes liquidaciones de productos del complejo sojero. Se destaca el aceite de soja, cuyo registro de los primeros 14 días supera lo liquidado en todo el mes de septiembre.

 

El 1 ° de octubre el ministro de Economía de la Nación realizó el anuncio de reducciones en los Derechos de Exportación (DEX) a modo de incentivar las liquidaciones de exportaciones agroindustriales. Luego de registrar ventas anticipadas al exterior por un volumen superior al promedio de los últimos años (las DJVE del complejo sojero -aceite, porotos y subproductos- para la campaña 2019/20 quintuplicaban en marzo del 2020 el promedio de las últimas 4 campañas, según datos del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca - MAGyP), en los últimos meses ello se vio compensado con un ritmo de negocios relativamente más amesetado, como puede verse en el gráfico adjunto. 

No obstante, en los últimos días se han generado grandes volúmenes de DJVE del complejo sojero. Se destaca la liquidación de aceite de soja, donde el tonelaje aumentó al punto que en menos de 15 días se superó lo registrado en todo el mes de septiembre. En cuanto a la comercialización general, MAGyP informó que se han comprometido 33,18 Mt de la cosecha 19/20, tanto de compras de la industria como de exportación, equivalente a un 65,5% de lo producido.

En el mercado de maíz, la campaña 2019/20 plantea una dinámica similar al de la soja pero alcanza un importante hito logrando el segundo mayor volumen de ventas al exterior en la historia comercial argentina. Esto ha dotado al cereal de un mercado competitivo y dinámico durante gran parte del año comercial actual. Ello se refleja en la plaza doméstica, donde todos los días existe un amplio abanico de puntas compradoras que alcanzan hasta los negocios del próximo año, en tanto que en el segmento soja las puntas abiertas para distintos meses de descarga han sido más acotados. 

Por otra parte, se afianza la tendencia a concretar un mayor volumen de ventas al exterior previo al inicio de la cosecha de los granos amarillos. Al 14 de octubre, el registro de DJVE para la cosecha 2020/21 suma 6,25 Mt del complejo maíz (grano y aceite).

Entretanto, GEA-Bolsa de Comercio de Rosario mantuvo firme en 7 millones de hectáreas la proyección de siembra de la nueva campaña, dado que incluso cuando falta agua en gran parte de la región central del país la intención del productor por hacer el cereal se mantiene firme. Sí se prevé un mayor pasaje a siembras tardías, dado el retraso que genera el déficit hídrico sobre los planes de siembra. En principio, la producción argentina de maíz 2020/21 se estima en 48 millones de toneladas, aunque el verano traerá los meses decisivos para afinar este número. 

Según las estimaciones de MAGyP, el avance de la siembra 2020/21 se mantiene por encima del ritmo presenciado el año pasado, con excepción de la provincia de Córdoba donde la sequía ha presentado mayor ensañamiento y sólo se ha podido avanzar sobre el 14% de las 2,9 M ha planificadas, cuando a esta misma fecha el año pasado ya se había sembrado el 25% del total. Por otra parte, se ha dado comienzo a la siembra de soja en algunas regiones de Entre Ríos, Santa Fe y Buenos Aires.

En cuanto al contexto internacional de los granos amarillos, se mantiene la tendencia alcista en los precios. Esto se debe en buena parte a las disminuciones en los stocks previstos en el informe de Oferta y Demanda Mundial (WASDE) del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) y a las nuevas compras de cereal estadounidense por parte de China luego de tres semanas sin negocios de maíz. Cabe destacar la fluida dinámica de transacciones que han mantenido ambos países a pesar de las tensiones diplomáticas por las que atraviesan. Por otra parte, se estima que los tifones que se presentaron en regiones productivas de China habrían reducido parte de la producción de este país, por lo que podría apuntalar sus importaciones en la nueva campaña. 

De momento, el clima seco que se presenta en el país norteamericano permite el avance de la cosecha que el lunes, según informó el USDA, alcanzó al 41% de la superficie sembrada, lo que presiona negativamente los valores de los futuros operados en Chicago. No obstante, esta presión no alcanza a contrarrestar la influencia de las reducciones de stocks y la fortaleza en la demanda internacional.

Por otra parte, pese a la expectativa que la próxima semana permita acumular milímetros de lluvia a algunos países sudamericanos, incluida Argentina, la falta de agua ha retrasado el avance de las siembras en Brasil, principal proveedor global de soja y maíz de nuestra región, así como también en Paraguay, lo cual cobra relevancia a nivel local considerando que el mercado argentino es el destino del 70% de la soja que se cosecha en Paraguay.

Según datos brindados del Área de Economía Rural de la Universidad Nacional de Asunción, se estima que la siembra de soja ha avanzado a la fecha sobre unas 300.000 a 500.000 hectáreas, apenas un 10% a 15% del área sembrada potencial, si lo comparamos con las campañas anteriores.

Apuntalado por una buena cosecha de soja, el Banco Central de Paraguay (BCP) estima para este año un crecimiento del 10,5% del valor agregado agrícola, según la última revisión publicada. La cosecha está estimada para este año en torno a las 11 millones de toneladas. Éstas son cultivadas prácticamente en su totalidad en el sudeste paraguayo, la llamada región oriental, con fuerte peso de los departamentos de Alto Paraná, Canindeyú e Itapúa, agrupando estas tres divisiones más del 65% de la producción, siendo allí donde se registran los mayores déficits de agua, tal como muestran los mapas adjuntos. 

La industria oleaginosa argentina es altamente dependiente de las compras desde Paraguay en los primeros meses del año, cuando aún no se generaliza la cosecha nacional, permitiendo por un lado estabilizar el ingreso de materia prima y por el otro, mejorar en la mezcla el contenido proteico de la harina para alcanzar el standard hi-pro, frente a la tendencia decreciente para este atributo de calidad de la soja argentina. Es por ello que potenciales retrasos en la cosecha del vecino país afectaría la logística de las plantas locales. Este año, incluso a pesar de la fuerte y persistente bajante del Paraná, el comercio de soja con Paraguay ha escalado a 2 Mt, por encima del 1,5 Mt importados entre enero y septiembre del año pasado.