Si bien la semana los eventos pluviales de la importancia que se observaron durante los primeros veinte días de abril han quedado atrás, el ambiente predominante será húmedo. Las posibles lluvias no aportarán un agravamiento sustantivo a la condición hídrica actual, sin embargo, el alto contenido de humead en la atmósfera baja es favorable para avanzar con la cosecha, no a la velocidad que sería deseable para recuperar los atrasos. La semana se perfila inestable, con mayor grado de cobertura nubosa. Esto puede favorecer el regreso de las lluvias a la zona central y norte del país, aunque de manera alternada y con registros de poca importancia. La situación hídrica no se vería complejizada por estas precipitaciones. El resto de la jornada de hoy, las condiciones de inestabilidad se mantendrán especialmente en el centro-oeste del país, con la presencia de algunas precipitaciones en forma débil y aislada que afectarán a la porción oeste de La Pampa, Sur de Córdoba, sur de San Luis, sur de Mendoza y norte de Neuquén. El martes, se prevé que las condiciones de inestabilidad se mantengan sobre la franja central del país, pero con baja probabilidad de que se registren lluvias y lloviznas, aunque no se descartan algunos fenómenos pero en forma muy débil y aislada, especialmente sobre las provincias de La Pampa y Buenos Aires. En el resto del territorio nacional también se prevé abundante cobertura nubosa, pero no se esperan lluvias. En cuanto a las marcas térmicas se prevé que en el sur del país presenten un leve incremento, mientras que en la porción norte se observará un leve descenso debido a la importante cobertura nubosa. El miércoles, la situación no presentará grandes cambios con respecto a la nubosidad, ya que la mayor parte del territorio nacional mostrará un cielo mayormente cubierto, inestable, pero sin lluvias significativas. Las precipitaciones esperadas serán muy acotadas y comprenderán la zona del noroeste patagónico, especialmente el oeste de Río Negro, sur de Neuquén y noroeste de Chubut. El jueves, el panorama comienza a cambiar lentamente. Las condiciones de inestabilidad que se observarían el miércoles sobre el noroeste de la región patagónica, se potenciarán y se extenderán a toda la franja centro norte de la Patagonia y se sumará el área cordillerana de la región de Cuyo, donde podrían generarse algunas nevadas de variada intensidad. En el centro y norte del país continuará el cielo con abundante nubosidad, pero no se prevén precipitaciones. El viernes, se prevé que el tiempo inestable y las lluvias ya sean de manera generalizada a toda la franja central del país, abarcando desde la región pampeana hasta el centro de la Patagonia, desarrollando lluvias y chaparrones de variada intensidad. En general, los acumulados previstos no sobrepasarían los 20mm, y los promedios se mantendrían entre 5 y 15mm. También se espera que se genere un núcleo de lluvias y chaparrones sobre el noreste argentino, especialmente sobre Chaco, Formosa y Misiones, mientras que en Corrientes y el norte de Santa Fe se mantendrá inestable y con baja probabilidad de lluvias. También se prevé que en aquellas zonas en las que no se den precipitaciones, se mantenga el cielo mayormente cubierto. El fin de semana se espera que el tiempo inestable esté presente en la mayor parte del territorio nacional, inclusive con el desarrollo de lluvias chaparrones generalizados. Si bien los acumulados previstos no serán demasiado significativos, la suma de lo que puede ocurrir entre el sábado y domingo serán por lo menos, moderados. Las marcas térmicas presentarán un leve descenso térmico, especialmente en la porción central del país. El viento también registrará cambios, ya que rotará al sector sur nuevamente, favoreciendo el descenso térmico. Las condiciones tenderán a estabilizarse a partir de la próxima semana.