Detalle por Subzonas

Detalle por subzonas


SUBZONA GEA I

En Totoras el evolución de la trilla de soja de primera abarca el 75% del área. Los rindes se estabilizan en 30 y 35 qq/ha dentro del amplio abanico: 18 y 53 qq/ha. El promedio se ubica 5 qq/ha por debajo del valor normal para la zona. La humedad es la correcta para su comercialización: 13,5% o menos. Las mermas de superficie debido a excesos hídricos no superan el 3%. Con la mitad de la superficie de la oleaginosa de segunda cosechada, los rindes obtenidos se asemejan o superan a los de primera. Se acercan a 35 qq/ha en promedio y varían de 25 a 40 quintales. Le resta un 5% a la cosecha del cereal de primera para su culminación. El rinde obtenido se afianza en 80 qq/ha dentro de un rango de 60 a 100 quintales. La seca de fines de diciembre disminuyó en 10% el rendimiento estándar de la zona. El cereal tardío y de segunda superaría en 5 qq/ha al resultado de primera en. El 70 % alcanza la madurez fisiológica y reportan niveles medios de isoca de la espiga y carbón. Pese a esto, el 80% de los cuadros está en muy buenas a excelentes condiciones. Referente a la campaña fina, 'todos los productores van a destinar algún lote al cereal' interpretan los técnicos. Se prevé una crecida del 20% en la intención de siembra triguera.

En la zona de Gálvez la cosecha de soja de segunda se solapa completamente con la de primera. Entre ambas asumen un progreso del 65% del área implantada. 'Falta trillar aquellas área bajas por falta de piso' esclarecen los profesionales. Los resultados logrados marcan los 35 qq/ha en promedio, pisos elevados de 30 y techos no tan altos: 42 quintales. Se evalúa que la oleaginosa de primera asume un valor normal para la zona mientras que la oleaginosa de segunda siembra lo supera holgadamente avecinando los rindes de la de primera. Concluyó la recolección del cereal temprano con resultados que se consolidan en 70 a 80 qq/ha. 'Muy pocos lotes alcanzan los 100 qq/ha mientras que hay pisos de 40 quintales' lamentan. En contraste, el cereal tardío lo califican como 'buenísimo'. Con respecto a la campaña triguera que se aproxima, 'estamos por sembrar una nueva cuota de esperanza' expresan animados. Las reservas del perfil juegan a favor y el precio del cereal es satisfactorio. 'Creemos que la superficie aumentaría de un 15 a un 20% con respecto al año anterior'.

'El buen tiempo permitió muchas horas de trilla por día, con buena calidad de grano y conforme' exponen los ingenieros de Monje con satisfacción. Esto permitió que las labores de recolección de soja de primera estén concluyendo. Quedaría un 30% de la superficie por cosechar. Se conciben rendimientos entre 30 y 35 qq/ha, con cimas de 45 y pisos de 20 quintales. La soja de segunda con su destacable performance, empata en resultados a la de primera. No obstante sólo se trillaron algunos lotes, el estado general del cultivo es muy prometedor. La cosecha maicera se liquidó en su totalidad arrojando un magro resultado promedio de 60 qq/ha. En tanto, el cereal de diciembre se distingue por su inmejorable estado. Los sembrados más tardíamente aún se hayan ultimando el llenado de sus granos. Por el momento, la siembra triguera está inconclusa. 'Se observa fría la campaña, hasta que no termine la cosecha de soja no tendremos datos ciertos' examinan los especialistas. Además, agregan que no hay consultas por parte de los productores acerca de las semillas de trigo.

'Todavía falta cosechar algo de soja de primera por problemas de falta de piso' reportan los ingenieros de El Trébol. Los rindes logrados son muy buenos: 40 qq/ha en un rango que va de 30 a 50 quintales. La soja de segunda se luce con excelentes rindes y casi equipara en resultados a la de primera: 38 qq/ha, máximos de 38 y mínimos de 25 qq/ha. Su promedio supera en 8 puntos al que se obtiene en un año normal. Sólo queda un 20% del cultivo en pie para dar por finalizada la cosecha de ambas siembras. La colecta maicera alcanzó el 70% del área y quedo relegada por la de soja. La totalidad de los cuadros del cereal tardío transitan la madurez fisiológica. Mantienen sus expectativas en 80 qq/ha en un rango de 50 a 90 quintales. No se reportan pérdidas de superficie en ningún sembrado. 'El trigo está tranquilo, hay mayor demanda de semillas en otras zonas. Algo puede subir el área pero todavía el productor está pensando en soja' detallan los especialistas.

SUBZONA GEA II

Fin de semana largo a plena labor cosechera en Bigand. Solo resta el 10% de la superficie para culminar con la colecta sojera. 'Quedan algunos lotes o sectores de lotes con problemas de exceso de humedad o falta de piso' puntualizan los técnicos. El rendimiento medio se consolida en 33 qq/ha, con mínimos de 24 y máximos de 43 qq/ha. La oleaginosa de segunda siembra ya alcanza el 80% de recolección. Los resultados son uniformes, se ubican en 28 y 32 qq/ha y los extremos se encuentran en 22 y 34 qq/ha. En ambas siembras hubo pérdidas de área que alcanzan el 7 y 5% respectivamente. El promedio en soja de primera es 5 qq/ha menor a lo que se obtiene en una campaña tipo, mientras que las segundas siembras se ubican 2 quintales por encima del valor de referencia. A diferencia del dinámico cabezal sojero, el maicero estuvo mas calmo, 'muy pocos lotes había sembrado y sólo algunos se cosecharon' reportan en la zona. Con un avance de cosecha del 10%, los rendimientos obetenidos se sitúan en 85-90 qq/ha dentro de un rango de 60 y 115 quintales. En tanto, el cereal tardío está en muy buenas condiciones cursando su madurez fisiológica. Las esperanzas se mantienen elevadas: 85 qq/ha, dentro de un rango de 60 a 110 qq/ha. En vísperas de la nueva campaña fina, los productores se actualizan a través de consultas a los profesionales y análisis de costos. 'Muchos están necesitando rotar, por lo tanto habrá un porcentaje de siembra obligatorio, mientras que otros siembran porque necesitan financiarse' analizan los expertos. Por el momento, suponen que no habrá diferenciación del área sembrada respecto a la campaña pasada.

Al igual que en Bigand, en la localidad de Bombal solo resta cosechar relieves bajos de soja de primera. 'Estos sectores con falta de piso representan un 2 o 3% de la superficie' detallan los ingenieros. Los rendimientos promedios son de 30-31 qq/ha. Se evalúa una descenso de 5 qq/ha respecto a la semana anterior. El progreso de la oleaginosa de segunda consigue un 70% del área. Tal como lo habían advertido, conquistan los 28 qq/ha en promedio. La escasa área consignada al maíz de primera se cosechó en su totalidad y adquirió un rendimiento de 70 qq/ha. La mayoría del cereal se sembró tardíamente o es de segunda. Ambas modalidades de siembra se encuentran en muy buen estado. Se estima que se recolectarán los tardíos a fines de mayo y los de segunda a medidados de junio. En cuanto al cultivo de trigo ' los ánimos nos son tan alentadores' expresan. Sin embargo, las consultas por parte de los productores para producir el cereal crecen día a día. Valúan un 15% de aumento en el proyecto de siembra respecto al otoño anterior.

SUBZONA GEA III

En las inmediaciones de Cepeda la cosecha prosperó un 85% del área. 'Tanto la de primera como la de segunda está lista para su recolección' describen los profesionales. En materia de rindes, el promedio de la soja de primera se avecina a los 30 qq/ha pero se desplaza entre valores extremadamente dispares: mínimos de 16 y máximos de 43 qq/ha. En contraste, hay más uniformidad en los resultados de la oleaginosa de segunda siembra. La media se arraiga a los 28 qq/ha dentro de un estrecho rango de variación de 24 a 35 quintales. El cereal de segunda en su madurez fisiológica marcha firme hacia buenos rindes. Urge la incertidumbre respecto a la nueva campaña fina. 'El trigo abre una gran incógnita de cara al precio futuro, disponibilidad de semilla, precio de cultivos alternativos (arveja)…' expresan perplejos los especialistas.

Con una recolección en Arroyo Dulce que ronda el 70% de la superficie destinada a soja de primera, el grano obtenido está muy seco. Presenta un 12% de humedad. 'Nuestro equipo de trilla además de lotes propios trabaja lotes de terceros (incluso semilleros) en toda la zona, por ende, hemos trillado casi todas las variedades y fechas de siembra. Hasta el momento el rinde promedio que indica el monitor de la cosechadora es de 2918 kg de soja...para nuestra zona es una calamidad o está muy cerca de ello' es el testimonio de los técnicos que recorren el área. Se diagnostica que los rindes cayeron entre 5 y 6qq/ha debido al 'lavado' de granos provocado por los recientes acumulados de 250 mm. Fundamentalmente, este efecto se magnifica en aquellos cuadros que se encontraban en madurez comercial previamente a las lluvias. En aquellas plantas donde persistían las hojas pudieron sobrellevar mejor este inconveniente y en esos lotes las pérdidas serían menores. 'Pero, en ese caso, no hay metodología disponible para constatar estas mermas' especifican los técnicos. Respecto a la oleaginosa de segunda, sólo se trilló un lote implantando sobre legumbres, no sobre trigo. 'Pintaba como el mejor y rindió 34 qq/ha'. Al igual que en otras zonas, el maíz sigue relegado para dar prioridad a la recolección de la soja. Aún quedan lotes por trillar, estiman que espera un 30% del cereal en pie. El maíz de segunda culminó el llenado de granos, afortunadamente antes de las primeras heladas. Hay evidencias de estrés en floración. Aún así, en general están buenos y las bases de rendimiento se fijarían en 80-85 qq/ha. Las intenciones de siembra para el cereal de invierno indican un aumento en superficie entre 10 a 15% como máximo.

Gracias al buen clima del fin de semana, en San Antonio de Areco se pudo avanzar sobre el 65% de los lotes de soja de primera. Los rindes medios comienzan a estabilizarse en 25-27 qq/ha, 25% menos que lo obtenido en campañas típicas. El grano está saliendo con humedades cercanas a la de comercialización (entre 14 y 16%). La cosecha de la oleaginosa de segunda aún no comienza. La promesa de su productividad decae a 26 qq/ha. El maíz de segunda alcanzó la madurez fisiológica en más de la mitad de los cuadros. Preserva su buen estado con rindes esperados entre 65 y 85 qq/ha. Las labores de cosecha progresaron sobre el 75% de la superficie correspondiente a maíz temprano. Lo que resta, espera en pie a que se termine de recolectar la leguminosa. En un año normal este cultivo produce 75 qq/ha en promedio, hoy se está obteniendo entre 55 y 60 qq/ha. Las perspectivas para la campaña triguera indican que el área se mantendría igual a la del año pasado aunque 'siempre se decide la mayor parte de su siembra a último momento'.

SUBZONA GEA IV

En los últimos quince días la cosecha de soja de primera progresó desde un 30 a un 80% en la zona de Junín. El grano está saliendo seco y los rindes se posicionan en torno a los 33 y 55 qq/ha. Este piso es cinco quintales inferior a lo obtenido al comienzo de la cosecha. La incipiente recolección de la oleaginosa de segunda marca rindes medios de 25 qq/ha. El avance de cosecha sobre la superficie implantada con este cultivo es de 20%. Las labores sobre el maíz de primera se encuentran ralentizadas y alcanzaron el 70% de lo implantado. La variación de rindes obtenidos se perpetúa entre 70 y 120 qq/ha. Los maíces tardíos avanzan sobre el estadio de madurez y su estado general es muy bueno. Para trigo hay expectativas de que suba el área de siembra entre un 10 a 20%.

Hacia el oeste, pasando Lincoln, los rindes obtenidos para soja de primera son muy dispares. Para una cosecha que comprende el 65-70% de la superficie implantada con la leguminosa, los resultados obtenidos varían entre 45 y 25 qq/ha. Este último valor se adjudica a suelos con limitantes para ser explorados por las raíces. El progreso de las labores sobre la oleaginosa de segunda apenas llega a 10%. 'Tenemos lotes de 24, 25 y 27 qq/ha y creemos que a medida que aumente el porcentaje de cosecha, estos valores serán reforzados ya que el cultivo está hecho'. Sobre los cuadros de maíces de segunda y/o tardíos recién se podrá ingresar en junio. El cereal está en madurez fisiológica en su mayoría y perdura en muy buen estado. El maíz temprano, muy castigado en su ciclo, fija pisos de rindes de 35 qq/ha. 'Hay dos o tres lotes donde se lograron cosechar 95 qq/ha, lo cual no es nada representativo de la zona' aclaran los ingenieros. El avance de cosecha es de un 50% y los rindes medios se consolidan en 55-60 qq/ha. '¿Intenciones para la siembra de trigo? Si las finanzas lo permiten habría un aumento de 10% respecto a lo sembrado el año pasado con cereal fino'.

En Facundo Quiroga la soja cosecha sojera tiene un avance de 75% y arroja resultados acordes a los rindes estándares de la zona: 35 qq/ha, en un rango de 27 a 52 quintales. El avance de cosecha de la oleaginosa de segunda siembra apenas llega al 20%. Los rindes obtenidos se posicionan en 23 qq/ha, pisos de 17 y techos de 32, pero se mantienen la expectativas que alcancen los 27 quintales en promedio. El cereal de primera viene atrasado con las labores. Su avance es del 30%. Los rindes efectivos promedios son de 75 qq/ha dentro de un excesivo rango de variación: 40 a 130 qq/ha. El promedio es 15 qq/ha menor al que se obtendría en un año tipo. Reportan alto ataque de isoca de la espiga en el cereal tardío. No obstante, continúa prometiendo rindes satisfactorios de 75 qq/ha. Resta el 20% de los cuadros para que la totalidad llegue a la madurez fisiológica. Se prevé un incremento del 10% del área triguera para la campaña fina 14-15.

SUBZONA GEA V

Casi finalizando la cosecha de soja de primera en áreas aledañas a Noetinger, el avance de las labores sería del 95%. Los muy buenos promedios de rindes se ubican en torno a los 38 qq/ha, valor que es superior a la media obtenida durante varios ciclos agrícolas. Este valor fue influenciado positivamente por los ambientes de inferior calidad donde la estrategia de manejo es grupos de madurez más largos combinados con fechas de siembra más tardías. La trilla sobre los cuadros de soja de segunda alcanza el 70%, plasmándose los muy buenos rindes pronosticados. Dentro de un entorno que va de 25 a 40 qq/ha, la productividad promedio es de 32 quintales. Este resultado también está por encima de lo normal para la zona. Se cosechó un 30% de la superficie destinada a maíz de primera y los rindes efectivos son menores a los esperados. Esto está sujeto a los híbridos empleados y a la calidad del ambiente pero en general podría decirse que hay una merma del 20% sobre el rinde estimado. De lo poco que hay recolectado, se lograron 80 qq/ha en promedio siendo que para un año normal las productividades medias se ubican por encima de los 90 qq/ha. Los maíces de segunda/tardíos transitan la recta final del ciclo. Queda un 30% de lotes que corren alto riesgo de sufrir daños por heladas tempranas si es que se producen. Presentan altos niveles de incidencia de tizón combinado con mucha severidad. Los rindes esperados van de 50 a 90 qq/ha y la expectativa media baja de 80 a 70 quintales. La campaña fina tiene mejores intenciones que el año pasado respecto a trigo y no así para cebada.

Culminó la cosecha de soja de primera en los lotes de Morrison que no tienen problemas de piso. Queda pendiente recolectar una mínima producción asociada a lugares que están complicados por falta de piso a causa de napas altas e inundaciones. Los rindes promedio están 5 quintales por encima de lo que es normal para la zona, logrando resultados entre 40 y 45 qq/ha. En las peores situaciones se alcanzaron a cosechar 30 quintales. Estiman una pérdida cercana al 18% del total de la superficie destinada a cultivos estivales. Con las máquinas situadas ahora en los campos con soja de segunda, el avance de labores es del 50%. Los rindes certifican las altas expectativas puestas en esta siembra: 38-42 qq/ha de promedio, con mínimos de 25. La trilla de maíz de primera abarca más de las dos terceras partes del área destinada al cultivo. Lo que queda por 'levantar' es debido a los mismos inconvenientes antedichos para soja de primera. Los resultados alcanzados se posicionan en 90 qq/ha, valores clásicos para la zona, con máximos que rondan los 120 quintales. Los maíces tardíos ya se encuentran en madurez fisiológica en óptimo estado. Necesitan días apropiados para que sus granos pierdan humedad y para que los perfiles de suelo, en muchos casos sobresaturados, permitan el ingreso de las maquinarias. Con moderados daños provocados por carbón, esperan obtener rindes cercanos a 70-80 qq/ha. Los ingenieros acotan que 'de todo lo de primera siembra, un gran porcentaje de lo cosechado está embolsado en el campo por falta de caminos transitables para camiones'.