Sigue el tiempo estable
La semana comprendida entre el jueves 16 y el miércoles 22 de junio presentará condiciones de tiempo estable. La presencia de un importante centro de alta presión que predominará en todas las capas de la atmósfera mantendrá las condiciones de tiempo estable, inhibiendo no sólo el desarrollo de precipitaciones, sino también provocando la ausencia de nubosidad en la mayor parte de la región GEA. Este sistema de alta presión, permitirá que durante las mañanas de los próximos siete días se desarrolle neblina y bancos de niebla, ya que la humedad presente sumada a las condiciones de estabilidad, poco viento y temperaturas relativamente bajas, será propicia para el desarrollo de este tipo de fenómenos. En cuanto a las marcas térmicas, se prevé que en general se mantengan dentro de los parámetros normales para la época del año. Cabe destacar que sólo durante la jornada del lunes, se espera un descenso moderado de las marcas térmicas y sólo ese día podrían observarse algunas heladas aisladas sobre la región GEA. El resto del período, los valores de temperatura se mantendrán relativamente alejados del riesgo de heladas en la zona. La nubosidad se presentará escasa en la mayor parte del territorio nacional y, como se mencionó con anterioridad, el importante centro de alta presión inhibirá el desarrollo de nubosidad, aunque no se descartan algunos períodos de cielo cubierto. La circulación del viento prevalecerá, la mayor parte de la semana, del sector norte o noroeste, favoreciendo que las temperaturas se mantengan relativamente elevadas. Sólo durante el domingo por la tarde/noche y parte del lunes se prevé una rotación del viento al sector sur que fomentará un moderado descenso térmico que podría generar las heladas mencionadas. Por último, las condiciones de humedad, en general, serán moderadas por lo que varios días de la semana se presentarán con neblina y bancos de niebla. Hay que mencionar que, a pesar de presentarse con humedad suficiente para generar neblina y bancos de niebla, no se prevén mecanismos que puedan provocar el desarrollo de precipitaciones en la región.