SUBZONA GEA I

La siembra de trigo esta limitada por la falta de humedad, que sigue avanzando. También influyen los altos costos de implantación y la incertidumbre de precios a futuro.

En la zona productiva de Carlos Pellegrini comenzó la siembra de algunos lotes de trigo en fecha temprana, con escasa tecnología, dado que solamente se está utilizando fertilizante nitrogenado. La humedad del suelo es escasa debido las elevadas temperaturas, que han evaporado más de lo habitual en esta época del año. Gran parte de la siembra se va a realizar luego de las primeras lluvias. La intención de siembra en este momento es un 30% menor que en años normales. Se sigue a la espera de la finalización del conflicto y con la esperanza de obtener una relación más favorable entre los insumos y los precios obtenidos por el cereal.

En las inmediaciones de El Trébol “la semilla sobra para sembrar” pero el movimiento de trigo es sumamente inferior al del año anterior. Se analizan de rutina los valores de fósforo y azufre, aunque en la práctica se va a fertilizar principalmente para cubrir parcialmente las necesidades de nitrógeno.

Hacia la localidad de Villa Eloísa la intención de siembra cayó un 20%, limitada por la falta de humedad. Técnicos de esta localidad estimaban que “salvo que llueva en los próximos 10 días, la siembra va a caer por debajo del 50%”.

Avanzando hacia las barrancas del Paraná, cerca de Timbúes y Maciel, ya se han realizado los barbechos para implantar el trigo, generalmente cercano al 20% de la superficie agrícola, pero “la falta de agua baja el entusiasmo y aunque se realizaron algunas siembras puntuales, por ahora, hay que esperar”.

SUBZONA GEA II

Las consultas sobre la campaña de trigo, que involucran a productores de campos propios y otros que en campos arrendados realizarían este cultivo, muestran una caída en la superficie cercana al 15%, caída que podría aumentar de persistir la falta de lluvias.

En la zona de Bigand los lotes no tienen suficiente humedad para sembrar, salvo en algunos sectores. En estas condiciones la emergencia se daría en forma despareja, por lo que deben producirse lluvias para iniciar las labores. El paro del campo redujo sensiblemente las actividades típicas de la época, y en este momento la situación es de espera. Esta es una zona “legumbrera” que se extiende a otras localidades cercanas como Pavón Arriba, Alcorta, Chabás y Aceval, y el trigo está siendo reemplazado por legumbres como arveja y lenteja, y cultivos como cebada forrajera, cebada cervecera, etc.

En las cercanías de Venado Tuerto y Villa Cañas la campaña viene bastante “tranquila”. Actualmente, se espera una reducción de la superficie triguera del 10 al 15%. Aquí, la falta de humedad no es tan marcada; se necesitan unos 10 o 15 mm para “largar” en la fecha óptima de siembra, que se da a mediados de junio.

La sequía es mayor en las cercanías de Rufino, donde las lluvias deberán ser más abundantes para que no caiga el área de implantación.

SUBZONA GEA III

La inversión en insumos y tecnología para esta campaña no es muy alentadora. Prácticamente no hubo ventas de precampaña de ningún insumo (v.g. fertilizantes como DAP y Urea, Glifosato, semillas de maíz, etc.) y se congelaron las ventas de todo tipo de maquinarias agrícolas a la espera de la resolución del conflicto agropecuario.

Hacia el norte, en localidades como Máximo Paz y Santa Teresa entre otras, el suelo está seco. Son necesarios unos 30 mm para comenzar con la siembra de los trigos de ciclos más largos. Si no caen en los próximos días, deberán ir reemplazándose variedades de ciclos largos por otras de ciclos más cortos. Avanzando hacia Pergamino la situación es similar: poco movimiento y a la espera de cambios.

En la región de San Antonio de Areco los porcentajes aproximados que se siembran con los distintos cultivos son: 23% de trigo, 19% de maíz, 57% de soja, y 2% de girasol. Se estima que para esta campaña la superficie sembrada con trigo caería un 5% (siempre y cuando llueva bien, sino seguramente será menor) y la de maíz aproximadamente un 10%. El perfil está muy seco y se necesitan al menos 40/50 mm antes de la siembra para una adecuada implantación. (Van cerca de dos meses sin llover, y se venía con déficit hídrico del verano, con algunas lluvias a fines de febrero y principio de marzo que no lograron recargaron completamente el perfil.) La fecha óptima de siembra en la zona va desde principios a mediados de junio para los ciclos intermedios largos, y de fines de junio a principios de julio para los ciclos cortos, pudiéndose extender la siembra de estos últimos hasta principios de agosto. Se está hablando de bajar dosis de fertilizantes, principalmente fosforados, a la siembra de los cereales.

SUBZONA GEA IV

La falta de agua se incrementa de este a oeste.

En el partido de Junín los productores han reservado muy poca semilla e insumos para el cultivo de trigo y siguen vacilando. En muchos sectores no se puede sembrar porque la humedad para la germinación de la simiente es nula. En cuanto a la fecha de siembra, aún nos encontramos en un momento óptimo y esto será así hasta mitad de julio. Por otro lado, se vislumbra un incremento de la superficie sembrada con cebada cervecera y colza, en detrimento del trigo.

Llegando a General Arenales y Ascensión la humedad escasea, principalmente a nivel superficial; los técnicos evalúan que con unos 30 milímetros podría iniciarse la campaña de trigo, pero sigue paralizada la compra de insumos y semillas hasta el momento.

En la región que rodea a General Pinto son pocas las ventas relacionadas con el trigo. A la fecha se proyecta una caída del 15% al 20% de la superficie, fundamentalmente por “la seca” y las protestas; todo jugando en contra.

SUBZONA GEA V

En la zona de Morrison se siembra todos los años aproximadamente un 30% del área agrícola. Los que vienen haciendo rotación tratan de mantenerla, aunque se espera menos superficie. Asimismo, se va a fertilizar lo menos posible, con valores del orden de los 50-60 kg/ha de arrancador. El nitrógeno, si se aplica, va a ser muy poco.

La zona de influencia de Marcos Juárez es una de las más perturbadas. En estos días se debería estar realizando la siembra de los ciclos largos, pero se necesitan casi 45 mm “para empezar a conversar”. Técnicos de la zona evalúan que el área destinada a trigo podría caer hasta un 50-60%, aunque hasta el 20 de junio “hay tiempo”.

La situación de indecisión es similar hacia el sur; en localidades como Canals o Arias tampoco hay movimientos y ventas en las agronomías y acopios.

Al parecer, el campo desensilló hasta que aclare.