INDICADORES CLIMÁTICOS
Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo (del 24 al 30 de septiembre)
Lluvias para el fin de semana
Se esperan algunas lluvias y tormentas de variada intensidad sobre la zona central del país.
Si bien en el comienzo de la semana las condiciones seguirán siendo estables, con temperaturas elevadas, poca nubosidad y viento del sector norte, la inestabilidad irá en aumento. A partir de las primeras horas del viernes, se prevé que comiencen a desarrollarse algunas lluvias y tormentas sobre el noroeste de la provincia de Buenos Aires, norte de La Pampa y extremo sur de Córdoba. Se irán generalizando con el transcurso de la jornada a toda la región GEA, alcanzando el sur de la provincia de Santa Fe.
Los desarrollos más significativos se concentrarían sobre el sur de la región GEA, con los núcleos más importantes en el noroeste de la provincia de Buenos Aires. No se descarta, tanto en el sur de Córdoba, como en el sur de Santa Fe el desarrollo de tormentas fuertes, más puntuales, pero con eventos muy significativos. Las precipitaciones previstas sobre la región GEA se mantendrían hasta el sábado, con fenómenos relativamente generalizados.
A partir del domingo, las condiciones volverían a presentarse estables, manteniéndose así hasta el martes, cuando retornarían las condiciones de inestabilidad. Si bien por ahora es baja la probabilidad, no se descarta que, entre el martes y miércoles próximo, puedan desarrollarse algunas lluvias, pero de manera muy aislada.
En cuanto a la temperatura, será una semana con gran amplitud térmica. Comenzará con viento norte y valores muy elevados con máximas cercanas a los 30ºC. Pero luego, con la llegada de las precipitaciones, las marcas térmicas volverán a caer de manera significativa. El lunes será la jornada más fría del periodo. Si bien no se esperan heladas, los valores se aproximarán al límite de este riesgo, especialmente sobre el noroeste de Buenos Aires y sur de Córdoba.
La circulación del viento también tendrá una gran variabilidad. Comenzará del sector norte, con moderada intensidad, luego, con la llegada de las lluvias, sufrirá una rotación al sector sur, promoviendo el descenso térmico.
Finalmente, la semana de análisis concluirá con viento nuevamente del norte sobre la región. La cobertura nubosa, al igual que los otros parámetros, también se presentará variable, acompañando los momentos de inestabilidad previamente mencionados.
Durante el jueves el cielo se mantendrá despejado, pero entre el viernes y el sábado se observará el cielo cubierto. Habrá una importante disminución temporaria entre el domingo y lunes, para finalmente concluir la semana con el cielo mayormente nublado.
La humedad en las capas bajas de la atmósfera se mantendrá elevada en los primeros días, debido a la presencia del viento del sector norte promoviendo el ingreso de humedad a la zona central del país. Luego, el avance del frente frío, provocará la disminución del contenido de humedad, de manera temporaria, ya que rápidamente el viento rotará al sector norte volviendo a proveer condiciones de humedad a la región GEA.
Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo (del 17 al 23 de septiembre)
Otra semana que pasó sin lluvias
No se observaron lluvias en ninguna de las estaciones meteorológicas que componen la red GEA.
En cuanto a las marcas térmicas, se observaron registros que en promedio se mantuvieron superiores a los valores normales para la época del año, con marcas entre 30 y 33ºC, que fueron muy superiores a las de la semana pasada. El dato más destacado fue el de la localidad de Noetinger, en la provincia de Córdoba, con un registro de 34,9ºC.
Las temperaturas mínimas se presentaron similares a la semana previa, con valores entre 1 y 3ºC, inferiores a los normales para el mes en curso. El registro más bajo fue en la localidad de Guatimozín, Córdoba, con 0,1ºC.
Con este panorama la situación de humedad ha empeorado respecto de la semana pasada, ampliando de manera significativa el área con características de sequía. Sólo una pequeña porción del noreste de Buenos Aires presenta reservas hídricas regulares. Analizando la perspectiva para los próximos 15 días, se puede ver que la necesidad hídrica en la provincia de Córdoba sigue siendo extrema, con registros de 140 y picos máximos de hasta 160 mm para recomponer la humedad en el perfil del suelo y alcanzar niveles óptimos. Santa Fe y el noroeste de Buenos Aires mantienen una necesidad de 80 a 100 mm y por último, el noreste de Buenos Aires es el de menor requerimiento, con valores en el orden de los 40 a 60 mm para volver a alcanzar características óptimas.
Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco
"Las lluvias previstas podrían avanzar sobre parte de las provincias del centro"
Sin sorpresas, la tercera semana de septiembre no mostró lluvias en casi todo el territorio argentino. Fueron solo los extremos los que recibieron algún leve aporte, aunque lejos de ser significativo. Hacia el norte, al igual que el periodo anterior, las favorecidas fueron las provincias de la mesopotamia, en este caso Corrientes, Misiones y Formosa. Hacia el sur, el extremo más austral de Tierra del Fuego, pero en ambos casos con acumulados escasos, inferiores a los 10 milímetros. Y en el medio NADA, algo mas que evidente si observamos el mapa de reservas de humedad edáfica. La condición de sequía se apodera de casi toda la superficie de nuestra región de interés, librando solo un pequeño sector, hacia el noreste de Buenos Aires. Solo allí las condiciones se escapan levemente de la escasez hídrica.
Septiembre arrancó con lluvias abundantes en parte de la zona núcleo, una sorpresa inesperada que encendió el optimismo de ir hacia un escenario más favorable en el cambio de estación. Lamentablemente el tránsito de las primeras dos décadas del mes no sostuvo ese comportamiento y la primavera arranco con el mismo déficit pluvial que arrastramos desde hace meses. El contenido de agua en los perfiles ya es extremadamente ajustado y llega a límites extremos. Basta con evaluar el requerimiento en milímetros necesarios para llegar a humedad optima, para entender que los valores están muy lejos de cualquier aporte pluvial que pueda ofrecer el mes en curso. Hay que tener en cuenta que atravesamos un evento de enfriamiento del Pacifico Ecuatorial Central que, sin alcanzar todavía el nivel NIÑA, aleja la posibilidad de cualquier aporte extraordinario de agua en forma generalizada. Ningún pronóstico de corto plazo está ni siquiera cerca de convalidar la probabilidad de lluvias abundantes para el NOA o el NEA.
Los modelos muestran un buen evento pluvial para el último fin de semana del mes, pero con epicentro sobre la provincia de Buenos Aires. Las lluvias previstas podrían avanzar sobre parte de las provincias del centro. Pero, salvo que se repitan desarrollos atípicos, como los que sorprendieron en la transición intermensual, también es difícil que esas zonas reciban acumulados en la medida de sus necesidades. En este contexto, todo parece indicar que los cultivos, en las zonas deficitarias, seguirán sometidos a una ajustada provisión de agua, que puede condicionar los rendimientos si el régimen de lluvias, en o por debajo de la media, se sostiene más allá de la transición hacia el mes de octubre.
