Indicadores Climáticos


Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo

Semana con intermitencia de lluvias

El periodo comprendido entre el jueves 4 y el miércoles 10 de enero comienza con presencia de lluvias y alguna tormenta aislada en el oeste de la zona GEA. Las condiciones meteorológicas tienden a mejorar durante el viernes 5. Pero la probabilidad de precipitaciones en forma de chaparrones y tormentas retorna hacia las primeras horas del sábado 6 de enero. Los eventos comenzarán en el sector sur, pero con el correr de las horas el área de lluvias se desplazará hacia el norte, afectando al resto de la zona GEA.

A partir de la mañana del lunes 8 se espera el pasaje de otra perturbación que provocará nuevas precipitaciones en la zona GEA. Las condiciones mejorarán, de oeste a este, durante la tarde del mismo día y permanecerán de este modo hasta el final del periodo de pronóstico, momento en el cual no se descartan algunos chaparrones aislados.

Las temperaturas se presentarán en ascenso, alcanzando los valores máximos entre 32 y 35°C  el viernes 5. Luego del pasaje de las diferentes perturbaciones, las temperaturas máximas tienden a descender, oscilando entre 30 y 32°C, aunque se espera un nuevo ascenso térmico hacia el fin del periodo de pronóstico. Los valores mínimos se ubicarán entre los 18 y 21°C entre el 4 y el 6 de enero, luego se espera un descenso debido a la irrupción de una masa de aire más fría. Los registros más bajos del periodo, entre 12 y 16°C, se producirán durante el martes 9 de enero. Posteriormente las temperaturas mínimas tienden a ascender nuevamente.

 

Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo

Lluvias sobre el oeste y sudeste de GEA

La semana comprendida entre el jueves 28 de diciembre y el miércoles 3 de enero se registraron lluvias que se concentraron en el oeste y sudeste de la zona GEA con acumulados oscilaron entre los 10 y los 20 mm.

El máximo acumulado en el periodo: 20,2mm, se registró en la localidad de Hernando, Córdoba.

Las temperaturas máximas fueron elevadas, y los valores más altos se localizaron en la porción centro/norte de la zona GEA, donde variaron de 37 a 38°C. En el sector sudeste las marcas térmicas rondaron los 31 a 33°C. El valor más alto, 37,8°C, se midió en la localidad de Chovet, en Santa Fe.

Las temperaturas mínimas tuvieron la misma distribución que las máximas, ya que los valores más altos, entre 13 y 16°C, se registraron en el centro/norte de la zona GEA, mientras que los valores más bajos, de 8 a 13°C, en el sector sur. La marca más baja del periodo, 8,4°C, se midió en la localidad de Chacabuco, Buenos Aires.

Con este panorama, y en función de las precipitaciones recibidas, las reservas de agua en el suelo mejoraron notablemente en el noroeste de la zona GEA, pasando del estado de sequía a reservas escasas. En el noreste los niveles de humedad disminuyeron de óptimos a adecuados, mientras que en el resto de la región la humedad de suelo se mantiene de regular a escasa.

Con estas condiciones hídricas en el noroeste del área GEA se requieren, en los próximos quince días, acumulados entre 100 y 160 mm para alcanzar el estado óptimo de las reservas, mientras que en el resto del área GEA los valores se reducen a montos entre 70 y 110 mm.

 

Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco

Alta probabilidad que las precipitaciones se mantengan con los valores normales como piso

Diciembre concluyó con un balance muy positivo de las precipitaciones. Todas las regiones productivas desde el Río Colorado hasta el norte de Jujuy recibieron acumulados mensuales dentro de los valores medios históricos o incluso muy por encima de ellos, con un marcado gradiente positivo sobre la franja este y la Mesopotamia.

Las lluvias que se desarrollaron en los últimos siete días mantuvieron las mismas características que las anteriores, gran variabilidad geográfica con eventos puntuales de extrema intensidad.

Como ocurrió con anterioridad en el sudoeste de Buenos Aires y en el centro de Santa Fe, este 31 de diciembre las tormentas más violentas azotaron Córdoba capital y sus alrededores. Ráfagas de viento acompañadas por importantes volúmenes de agua (más de 70 milímetros) en cortos periodos de tiempo provocaron daños estructurales, anegamientos y pérdidas totales en lotes de soja.      

Sin minimizar los daños causados es necesario mencionar que estos eventos disruptivos han sido la excepción y se han producido en sectores bastante puntuales y acotados.

A partir de la segunda mitad de la primavera el régimen de lluvias comenzó a ser más generoso y la recurrencia del agua se consolidó en noviembre y diciembre haciendo mucho más homogénea la distribución de las precipitaciones sobre todo el país.

Las actuales reservas de agua son un fiel reflejo del buen desempeño pluvial del último trimestre, las zonas de sequía han desaparecido dando paso incluso a zonas acotadas con exceso hídrico. La disponibilidad de humedad en los perfiles mayoritariamente se encuentra en niveles adecuados.

Partiendo de estas condiciones y considerando que los modelos globales de pronóstico indican la continuidad del evento Niño hasta avanzado el otoño, es lógico considerar como más probable que las precipitaciones se mantengan con los valores normales como piso, acompañando positivamente las siembras de esta campaña.