Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo

Tiempo inestable, aumento de temperaturas y probabilidad de lluvias

El periodo comprendido entre el jueves 1 y el miércoles 7 de agosto comienza inestable. Hay probabilidad de algunas lloviznas aisladas durante la mañana del jueves 1, principalmente en el sudeste de la zona GEA. Las condiciones meteorológicas tienden a mejorar rápidamente, de norte a sur, acompañadas por la intensificación de la velocidad del viento del sector norte. A partir de la tarde/noche del viernes 2 se espera el pasaje de un sistema frontal frío que provocará un aumento de la probabilidad de precipitaciones y tormentas aisladas, algunas localmente intensas. En horas de la tarde del sábado 2 las condiciones del tiempo mejorarán favorecidas por  la rotación del viento al sector sudoeste.

La estabilidad se mantendrá hasta el martes 6 de agosto, momento en el que retorna la probabilidad de precipitaciones. Este último evento de lluvias se debe al pasaje de un sistema de baja presión, por lo que la confianza del pronóstico es moderada.

Las temperaturas inicialmente se presentarán en ascenso, con máximas alcanzando valores entre 28 y 30°C durante el viernes 2. Con el pasaje del frente frío antes mencionado los registros máximos descenderán, en toda la zona GEA, ubicándose en el rango de los 15 a 18°C.

Las temperaturas mínimas tendrán el mismo comportamiento que las máximas. Los valores mínimos del periodo, entre 4 y 6°C en el sur del área GEA y levemente superiores en el norte, se alcanzarán entre el domingo 4 y el lunes 5 de agosto. Luego, los registros tendrán un leve ascenso.

Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo

Sin lluvias y con reservas escasas en la mayor parte de región núcleo

La semana comprendida entre el jueves 25 y el miércoles 31 de julio no se registraron precipitaciones en la zona GEA.

Las temperaturas máximas rondaron entre los 24 y 27°C en el norte de la zona GEA, mientras que en el sector centro/sur oscilaron entre 22 y 24°C. El valor más alto, 26,9°C, se midió en la localidad de Bell Ville, Córdoba.

Las temperaturas mínimas variaron entre  0 y 2°C en el sector norte y la zona más fría, con valores entre -4 y -1°C, fue el sur del área GEA donde se produjeron heladas generalizadas. El valor más bajo del periodo, -4.2°C, se midió en la localidad de Rojas, en Buenos Aires.

Con este panorama las reservas de agua en el suelo continuaron disminuyendo respecto de las semanas previas. Las condiciones son, en general, escasas, salvo en la porción sudeste donde son regulares. Con las actuales condiciones, en los próximos quince días, se requieren entre 60 y 80 mm en la mayor parte de la zona GEA, salvo en el sudeste donde los valores necesarios disminuyen hasta los 20 a 60 mm para alcanzar las condiciones de humedad óptimas.

Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco

Julio finalizó sin lluvias en el oeste y con algunos montos escasos sobre el este de región núcleo

Julio culminó sin provocar ningún cambio en el comportamiento climático. La escasez de agua  que mostró desde su inicio, siguió como una continuidad de lo ocurrido el mes anterior.

Las estadísticas del mes pueden son destacadas. La retracción pluvial fue muy marcada, a tal punto que la mayor parte de la zona núcleo, principalmente la franja oeste, no recibió precipitaciones en todo el periodo.

Como ocurre normalmente en el invierno, las lluvias que se desarrollaron fueron débiles y lo hicieron sobre la franja este. Pero, aun en esos casos, los acumulados mensuales estuvieron muy lejos de los normales, apenas cercanos al 10% de los valores medios históricos.

Considerando los últimos 60 años documentados, con los totales de precipitación recibidos, julio 2024 fácilmente se incorpora al escaso grupo de meses de julio que sumaron menos de 4 milímetros en sus 31 días.

A esta prolongada ausencia de agua se sumó un abrupto descenso de las temperaturas así, julio 2024 marcó otro récord desfavorable, un intensa y persistente ola polar que sumergió los termómetros entre los –4 y los –8ºC por casi diez días seguidos. Un comportamiento térmico en las dos primeras semanas del mes del que se tienen pocos antecedentes.           

El patrón seco se ha instalado durante los últimos sesenta días y las reservas de humedad dan cuenta de ello. El agua acopiada durante el otoño restableció los perfiles permitiendo una siembra sin sobresaltos, pero el avance del invierno fue mermando semana tras semana la disponibilidad hídrica comenzando a complicar el desarrollo de los cultivos que también se ven perjudicados por las heladas recurrentes e intensas.     

   Los modelos de pronóstico de corto plazo son un poco más optimistas para el arranque de agosto. Se prevé un cambio en la circulación que sumará aire más cálido y húmedo hacia el centro del país los primeros días de agosto. Este proceso permitirá enfriamientos menos rigurosos, temperaturas más moderadas y un mayor contenido de agua en la atmósfera que posibilitará el desarrollo de precipitaciones.  Las lluvias previstas mantendrán el mismo patrón invernal de registros débiles a moderados y preponderancia sobre el este pero, según los modelos, podrían superar en un par de días los totales de todo julio.