SUBZONAS Y RED DE ESTACIONES METEOROLÓGICAS GEA
SUBZONA GEA I
En el área de Los Cardos hace 45 días que no llueve y los cultivos están muy estresados. Las sojas de primera se observan con buen desarrollo y están en R3 y R5 pero el estrés termohídrico comienza a afectar el potencial de rinde. Las altas temperaturas que se están registrando también están afectando a las sojas de segunda y a las sembradas tarde por los problemas de anegamiento. Éstas, se observan muy retrasadas. También está habiendo un severo problema de plagas protagonizado principalmente por orugas en el cultivo de soja. Los ingenieros esperan que llueva en los próximos días para que el rendimiento del cultivo de soja de primera no se afecte tanto. Para las tardías y las de segunda, que fueron sembradas tan tarde en la zona, el escenario es mucho más complicado. En maíz, la tanda que pudo ser sembrada en septiembre y octubre, hasta hace poco se observaba muy bien, pero la falta de agua y el efecto de las altas temperaturas de enero, las está secando rápidamente. La continuidad de esta situación empieza a modificar las expectativas de rendimiento. Hacia el oeste, entrando en el centro y norte de Córdoba “el panorama es aún mucho más complicado tanto para maíz como para soja” alertan los técnicos.
“Hace 30 días que no llueve en la región pero increíblemente los lotes de soja no se están machoneando como en sequías anteriores por el nivel de reservas del suelo. En cambio, los maíces de segunda están casi totalmente marchitos” comentan los ingenieros de El Trébol. La falta de humedad en el ambiente se está notando en la oleaginosa, sobre todo en la caída de hojas que se está produciendo pero no hay manchoneos. Tampoco se observa esto en sojas de segunda; “o sea, hay reservas todavía como para soportar las condiciones ambientales si bien hay, seguramente, una reducción de rindes por la falta de agua” explican los técnicos. La soja de primera está en fructificación y la condición es evaluada entre muy buena y buena. La soja de segunda se está resintiendo más ante la falta de agua y los lotes del área están en condición buena y regular. El maíz se está secando anticipadamente a lo previsto y los sembrados de segunda están con un marcado estrés hídrico. A pesar de esto, se sigue esperando un buen nivel de rinde en maíz de primera, la mayor incertidumbre está en el de segunda si continúan las condiciones de sequía.
SUBZONA GEA II
En Bigand se cuentan ya 40 días sin lluvias y la situación empieza a marcar la calidad de los suelos y el manejo de los cuadros. En las sojas de primera, por ejemplo, los lotes de buena capacidad de uso, están soportando bastante bien las condiciones ambientales adversas de este enero. Por el contrario, en lotes tipo overo, o con capacidad de uso limitada, los 40 días sin agua se están cobrando cerca del 20 al 30% del rendimiento potencial. Pero es en las sojas de segunda donde se notan los mayores problemas. Las pérdidas de plántulas en algunos casos están llegando a ser de un 50%. Otro tema que están indicando los ingenieros es fuerte aumento de la población de orugas. Cada vez son más frecuentes los controles para proteger a los cultivos de la oruga medidora y bolillera, y sobre todo por esta última, que es la que más daño está produciendo. En el cultivo de maíz, por un lado, el componente de rinde “número de granos por superficie” quedó muy bien definido pero el peso que se obtendrá de esos granos con la continuidad de estas condiciones está amenazado. El cultivo se está secando muy rápido y eso está resintiendo esta última componente de rinde. Los cultivos de maíz de segunda están en V5 y V6, a tiempo de recibir nuevos aportes de agua antes de iniciar sus etapas reproductivas.
SUBZONA GEA III
En Pergamino la lluvia dejó poco más de algunos milímetros el 31 de enero. Las precipitaciones privilegiaron la zona que se extiende hacia el río con 12 a 20 mm, de forma errática y hacia Carabelas o Rojas no pasó nada. Los ingenieros del área comentan que hasta ahora los cultivos en general están bien, y que los milímetros que aporte la primera quincena de febrero van a ser muy importantes para sostener esta situación. En el cultivo de soja se observa un muy bien desarrollo, con 10 a 19 nudos, pero de a poco se empieza a marcar la diferencia entre la calidad de los suelos. En sojas avanzadas, que están en R5, se observa una pérdida de vainas, aunque no sería grave de mejorar la situación hídrica en las próximas semanas. Se destaca un fuerte ataque de orugas defoliadoras, bolillera, arañuela en menor escala y en forma muy aislada comienzan a aparecer las chinches. En el cultivo de maíz se destaca el ataque de gusano cogollero que está siendo controlado en estos momentos. En los cuadros de maíz más avanzados, si bien se esperan muy buenos resultados, ha sido afectado el llenado y perdieron hojas muy rápidamente. Hay una tanda de lotes que fueron más sembrados más tarde y ahora están en panojamiento y necesitan agua perentoriamente. Por detrás están los de segunda que están en V5 y V6 y está muy sufrido.
El estrés ambiental ya comienza a impactar en los cultivos de San Antonio de Areco. La mayor parte de la soja de primera está en R2 a R3 aunque los cuadros sembrados con ciclos cortos están más adelantados y se observan en R4 a R5. Los ingenieros del área evalúan que los sembrados en fecha están muy buenos. También explican que el retraso en la fecha de siembra por las excesivas lluvias fue muy considerable y en esta situación se encuentran un 15 a 20 % del total de los lotes de primera. Por lo tanto parten con una baja en el potencial de rinde. Debido a las altas temperaturas y las escasas lluvias de enero se han secado muy rápido los primeros centímetros del suelo y se están agotando las reservas en profundidad. Se empieza a notar el estrés en los lotes de baja calidad y en las zonas donde hubo charcos y lagunas, y los suelos son más compactados y arcillosos. Los lotes más afectados son los de soja de segunda que fueron sembrados tarde en diciembre y enero. Están con muy poco desarrollo, pérdida de plántulas y en una situación crítica. El maíz está en muy buenas condiciones, ya en la etapa de llenado de grano en la gran mayoría de los cuadros. Algunos están muy avanzados alcanzando la etapa de maduración, sanos y con altas expectativas de rinde. Los maíces de segunda y los tardíos, que representan un 5 a 10 % de la superficie total, están entre V8 y V10 en su mayoría. Están buenos, pero se empieza a marcar el estrés hídrico en la falta de crecimiento. También se observa en estos una moderada presencia de gusano cogollero, que también está afectando al cultivo de sorgo. “De llover bien esta fin de semana unos 30 a 40 mm, se revertirá la situación sin mayores daños” comentan los técnicos.
SUBZONA GEA IV
En el partido de Junín, las sojas sembradas temprano están buenas, aunque es necesaria una lluvia ya que están definiendo rendimiento. Las sojas más tardías y de segunda, requieren precipitaciones de manera urgente, dado que los primeros centímetros de suelo están totalmente secos. Los maíces, implantados en fechas normales, están muy buenos y muchos ya han completado el llenado de grano, en cambio los sembrados en diciembre están en plena definición de rendimiento, por ende requieren, de manera imperiosa, que llueva.
En las inmediaciones de Lincoln y Gral. Pinto es muy fuerte el déficit hídrico. Desde el 20 de diciembre no se presentan lluvias significativas en la zona, con excepción del chaparrón de entre 10 y 20 mm del 17 de enero, los que no llegaron a revertir por mucho tiempo el panorama estrés para los cultivos.
En el caso del maíz, los sembrados temprano, que representan un 60% de la superficie, se espera un promedio de 90 qq/ha, con valores que irían desde picos de140 qq/ha hasta pisos de 50 qq/ha por problemas de polinización de granos en floración a causa de las excesivas lluvias. Se espera iniciar la cosecha de estos lotes hacia fines de febrero, algo adelantada por las elevadas temperaturas y la falta de humedad. Los maíces de siembra “intermedia”, que se sembraron durante noviembre, y representan un 25% de la superficie, están entrando en floración, y son los más comprometidos por la falta de agua. El 15% restante, corresponde a maíz de siembras tardías, posteriores al 20 de diciembre, y presenta nacimientos irregulares, con semillas sin nacer, a causa de la poca humedad al momento de la siembra. Finalmente, la soja de primera -70% de la superficie- sembrada desde mediados de octubre hasta fines de noviembre, presenta “redondeles” en los lotes, donde se ven afectadas las plantas por la falta de agua. Se encuentra en llenado de granos, con gran necesidad de agua para sostener su potencial de rinde. La soja de segunda o de siembras tardías, que recomenzó a sembrarse a partir del 10 de diciembre, se presenta muy estresada y con escaso desarrollo, con urgente necesidad de lluvias.
SUBZONA GEA V
En la localidad de Noetinger se registraron 31,6 mm durante la última lluvia. Estos son sumamente oportunos para la soja de primera, que se encuentra en llenado de granos. En los últimos lotes sembrados, tardíos o de segunda, serán vitales, ya que se venían perdiendo plantas por falta de humedad en superficie. En el caso del maíz, los sembrados temprano se encuentran en el final del llenado ya con rinde “asegurado”, por lo que los más beneficiados por esta lluvia serán los maíces tardíos.
Se registraron 15 mm en la estación meteorológica de Bell Ville los que, a pesar de ser escasos, traen un gran alivio en la zona, dado el fuerte estrés hídrico que padecían los cultivos. Para la soja de primera, son de gran importancia para no resentir el llenado de granos, y más aún para las sojas de siembras tardías, que estaban fuertemente afectadas por la desecación del suelo y ya mostraban rodeos con muerte de plantas en los casos más graves. Se reporta fuerte presión de plagas para la que se están efectuando tratamientos en algunos lotes. Finalmente, los maíces sembrados temprano ya prácticamente tienen definido el rendimiento, aunque estos milímetros resultarán favorables para los lotes que aún se encuentran llenando granos. Estas lluvias también son muy benéficas para el maíz de segunda y los de siembras tardías, que mostraban hojas cloróticas por la falta de agua.