Detalle por Subzonas


SUBZONAS Y RED DE ESTACIONES METEOROLÓGICAS GEA

 

SUBZONA I

En Cañada Rosquín la siembra de trigo llegó a su fin sin haber podido jugarse —por falta de humedad— la última carta: los ciclos cortos. Esto deja un déficit de área sembrada respecto a lo intencionado. Los lotes implantados se encuentran en estado aceptable: “Con pocos milímetros tendremos asegurada la etapa de crecimiento del cultivo, que transita la recta final de la etapa de macollaje”, dicen los técnicos. Para llegar en óptimas condiciones a la siembra de maíz, necesitarían acumular aun entre 40 y 50 milímetros. Los barbechos se hicieron en tiempo y forma.

“Necesitamos unos 40 mm antes del 15 de agosto para que el trigo no comience a perder potencial de rinde”, dicen desde Carlos Pellegrini. El 70% de cuadros aún se conservan en buenas condiciones y hay un 30% en estado regular. “Hay algunos lotes con hojas secas producto de las heladas y a la incapacidad del cultivo de absorber nitrógeno por la escasez de humedad de los suelos”. Todos los lotes están en inicios de macollaje, creciendo lento, pero si se presentan las lluvias a tiempo podrían retomar su desarrollo sin perder productividad. En cuanto a las fertilizaciones nitrogenadas comentan que fueron muy reducidas esta campaña. Los productores que esperaban corregir las dosis en macollaje no lo han podido hacer por falta de lluvias. Y la gran mayoría no completarán los esquemas de fertilización. "Prácticamente han decidido dejar los lotes en las condiciones en que se encuentran en este momento.” Por otro lado en el área esperan lluvias para mantener las intenciones de siembra maiceras: “se necesitarían unos 50 mm en agosto para pensar en sembrar maíz temprano en tiempo y forma”. 

“Por acá seguimos esperando que llueva algo, no se ven problemas en trigo pero si llueve, mejor”, comentan los ingenieros de El Trébol. Los cuadros implantados se encuentran en buen estado, emitiendo hojas. Se necesitarían 20 mm para mantener la condición del cereal. Si no aparecen estas lluvias, para mediados de agosto se comenzará a resentir el rinde del trigo. Respecto a la fertilización, los técnicos mencionan que los niveles fueron similares a los del año pasado. Se aplicó la dosis completa a la siembra. Al consultarles por la superficie con ciclos cortos que quedo sin sembrar, indican que un 15% no pudo implantarse por la falta de agua. Se están realizando los barbechos para la campaña gruesa. Sin embrago, advierten que se necesitarían 50 mm para implantar el maíz con buenas condiciones de humedad.

 

SUBZONA II

En Bigand no se registraron lluvias en los últimos días. “No hay más chances de sembrar los trigos de ciclo corto ya que el cultivo no podrá lograr su potencial de producción”, señalan los ingenieros. Los lotes implantados sobreviven pero con muy lento crecimiento, esperando una lluvia. Los cuadros se encuentran macollando y la mitad de ellos se los clasifica como regulares y el resto, como buenos. En cuanto a los niveles de fertilización, fueron más bajos que los de la campaña pasada. Este año, el nitrógeno fue el nutriente de menor dosis en la fertilización. “Seguramente habrá algún lote que necesite complementar con algo de nitrógeno, pero debe llover pronto para aplicarlo”, indican. “Para lograr buenos rendimientos se necesitarían unos 20 a 30 mm y sería necesario que contemos con lluvias en septiembre y octubre”, agregan. Respecto a los barbechos para la campaña gruesa, se han realizado en tiempo y forma en un gran número de lotes, con muy buenos resultados. “Los productores que se demoren en la realización de los mismos, seguramente, deberán trabajarán mecánicamente los lotes para controlar las malezas”, advierten. “Estamos muy cerca del inicio de siembra de maíz temprano. Pero para que se pueda llevar adelante es necesario que se acumulen precipitaciones por arriba de los 100 mm y bien distribuidas para humedecer correctamente el perfil”, comentan.

“No hay más chances de sembrar, sin arriesgar un montón”, advierten los ingenieros de Bombal. Los trigos de ciclo corto quedaron todos sin sembrar por la falta de agua. Los lotes implantados se encuentran en buenas condiciones, creciendo con la poca humedad que tienen. Con alguna precipitación se podrían refertilizar sin inconvenientes, pero haría falta una lluvia de entre 50 a 60 mm para que el cultivo avance sin problemas.

 

SUBZONA III

En Colón concluye la siembra de trigo. Los ciclos cortos no llegaron a sembrarse por falta de humedad dejando entre un 5 y un 10% de superficie implantada por debajo de lo intencionado. Los lotes se encuentran en buen estado general y algunos muy buenos. A diferencia de otras zonas más castigadas por sequía, allí contaron 30 mm acumulados en junio que le dieron un respiro al cereal. El cultivo promedia el inicio de macollaje. “Necesitaríamos unos 20 a 30 mm en los próximos días para afrontar los momentos de mayores requerimientos y complementar con lluvias en septiembre - octubre para maximizar rindes” mencionan los ingenieros de la zona.

En los lotes en barbecho se vienen realizando las labores en tiempo y forma. Con un alto porcentaje de control y favorecidas por las lluvias de junio.

 

SUBZONA IV

En General Pinto los trigos crecen lento por falta de agua —más de un mes y medio sin lluvias importantes— sumada al efecto de heladas de semanas previas. Durante las últimas horas las tormentas dejaron un acumulado de casi 9 mm que darían un leve impulso al cultivo. Los lotes sembrados entre mayo y principios de junio se encuentran macollando y en condiciones entre aceptables y buenas. Estos comprenden el 70% del área. Los de segunda quincena de junio en adelante, se sembraron con humedad muy justa y su implantación no fue bien lograda. Recibieron el golpe de las heladas en peores condiciones, encontrándose hoy están regulares. La mayor parte del área se fertilizó con nitrógeno a la siembra, aunque en dosis menores que la campaña anterior, debido a mayores costos y rindes objetivos menores que en el año precedente. En algunos lotes, principalmente en los de siembras más tardías se aplicaron dosis de base a la siembra para completar más adelante previendo la ocurrencia de alguna lluvia.

De cara a los cultivos de gruesa son variados los factores que están influyendo en la decisión del productor: costo y disponibilidad de insumos, disponibilidad crediticia, incertidumbre, y precios de granos que tienden a la baja. Sin embargo, lo que marca la cancha es la falta de agua: “Necesitamos 200 mm por lo menos para el maíz temprano. Los perfiles cuentan hoy con entre un 30% y un 35% de la capacidad de campo. Es probable que de mantenerse estas condiciones algunos lotes terminen volcándose a soja y quizás una parte a maíz tardío. Se terminará de definir sobre la hora”, advierten los ingenieros. Los barbechos se completaron en tiempo y forma, cuando las condiciones ambientales lo permitían.

La falta de agua ayuda a que la proliferación de malezas se vea limitada y los lotes se mantienen limpios en general.

 

SUBZONA V

“Los trigos están “quedados”. Muchos lotes aún no están macollando. Están necesitando agua. Si bien estamos en invierno y es sabido que nuestra zona no es llevadora, se nota la  lentitud en el crecimiento a causa de esto”, dicen los asesores de Corral de Bustos. Por otro lado explican que en la zona han tenido lugar muchas heladas que le vienen bien a la gran proporción de trigos de ciclo intermedio que hay: “pero el combo de bajas temperaturas más la falta de agua le está afectando. Las emergencias de los lotes han llegado a tardar hasta 15 días”.