Indicadores Climáticos


Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo

Lluvias entre domingo y lunes

Gran parte de la región recibirá lluvias y tormentas de dispar intensidad. Pueden desarrollarse tormentas de moderada a fuerte intensidad en forma puntual y de corta duración.

En el inicio del periodo la elevada humedad atmosférica y las altas temperaturas para la época provocarán inestabilidad y el desarrollo de lluvias y tormentas de variada intensidad.

Gran parte de la región GEA recibirá lluvias y tormentas de dispar intensidad entre el domingo y el lunes. Si bien no se prevén acumulados demasiado importantes en volumen, no se descarta que, de manera puntual, se desarrollen tormentas de moderada a fuerte intensidad, pero de corta duración. Ese será el único momento de la semana con lluvias sobre la región, el resto se mantendrá estable y con gran variabilidad térmica.

Las temperaturas, inicialmente presentarán valores superiores a los niveles normales para el mes de agosto, pero que cambiarán rápidamente a partir de la llegada de las lluvias. El frente frío que provocará el desarrollo de las precipitaciones, también fomentará la rotación del viento al sector sur y, con este cambio, las marcas térmicas descenderán de manera muy significativa provocando, entre el martes y el miércoles, heladas generalizadas en toda la zona GEA.

La cobertura nubosa tendrá tres momentos destacados. El primero, entre el jueves y el sábado, cuando la nubosidad será variable, con cielo cubierto y la presencia de neblina y bancos de niebla matinales, que generan nubosidad en horas de la mañana y cielo mayormente despejado en horas de la tarde. El segundo, entre el domingo y lunes, con el cielo cubierto, tiempo inestable y la probabilidad de lluvias y tormentas. Por último, entre el martes y miércoles, el cielo se mantendrá mayormente despejado, con aire estable, frío y seco.

La circulación del viento durante la primera mitad de la semana será del sector norte, potenciando el ascenso de la temperatura y el aumento de la humedad. La segunda mitad el viento será marcada del sector sur, favoreciendo el descenso de las marcas térmicas.

La humedad en las capas bajas de la atmósfera también mostrará grandes diferencias entre el inicio y el final de la semana. Al comienzo la humedad será muy elevada, incluso en aumento con el correr de los días, provocando la presencia de neblina y bancos de niebla que serán una constante. A partir del fin de semana, con el pasaje del sistema frontal frío se espera una fuerte disminución de la concentración de humedad en la porción central del país, dejando características estables en toda la región.

 

Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo

Otra semana sin lluvias en GEA

Las condiciones frías y secas dejan otra semana sin lluvias en la región núcleo.

Las temperaturas máximas presentaron valores muy inferiores a los registrados la semana pasada, con temperaturas entre 20 y 22ºC, muy próximos a los niveles normales para el mes de julio y agosto. El dato más destacado se midió en Pozo del Molle, Córdoba, con un registro de 22,5ºC. Las mínimas fueron similares a las de la semana anterior, con valores por debajo de los promedios normales estacionales. Las temperaturas más bajas de la semana fueron entre 2ºC bajo cero y 4ºC bajo cero. El valor extremo ser registró en la localidad de Colonia Almada, Córdoba, con 5,2ºC bajo cero.

Las reservas de humedad en el suelo muestran condiciones similares a la semana pasada, con características hídricas relativamente buenas en el este de la región, y perdiendo humedad hacia el oeste. En general las reservas se presentan entre adecuadas y regulares, pero sobre el noroeste de la región GEA todavía se observan zonas con reservas escasas, mientras que sobre el noreste de Buenos Aires la humedad edáfica se mantiene óptima. Si bien no se han registrado lluvias en la zona, la pérdida de humedad no es demasiado significativa debido a las bajas temperaturas que se vienen registrando.

Para los próximos quince días, se puede concluir que no se necesitan lluvias significativas sobre el noreste de Buenos Aires, pero hacia el oeste, la necesidad de precipitaciones va en aumento, hasta alcanzar un máximo sobre Córdoba de 80 a 100 mm para alcanzar niveles óptimos de humedad.

 

Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco

Índice ONI: “el mes de julio no alienta una evolución a neutralidad”  

El arranque de agosto llegó sin sorpresas en cuanto a las precipitaciones. La última semana de julio estuvo dominada por un fuerte enfriamiento que abarcó todo el territorio nacional provocando heladas generalizadas, alejando la posibilidad de que se desarrollara algún tipo de evento precipitante.

La intensa circulación de aire frío llegó a su punto máximo el día 29 de julio, cuando los registros bajo cero invirtieron su distribución territorial. Con valores de hasta -7ºC, la temperatura mínima registrada en Chaco, fue mucho más baja que la de Ushuaia (+5ºC). Esto muestra la amplia y dispar cobertura territorial que tuvo el ingreso de aire polar. Las intensas anomalías que mostraron las temperaturas afectaron también al sur del Brasil, con registros bajo cero y nevadas extremadamente atípicas.

El clima frío y seco mantuvo continuidad en el arranque del nuevo mes. Esta vez, el cambio de circulación al sector norte no aumentó el ingreso de humedad hacia el centro el país. El porqué de esto está en la influencia del pulso frío que mantuvo baja la humedad en superficie sobre sur de Brasil. Esto afectó negativamente la posibilidad de precipitaciones sobre nuestra región pampeana.  

Ya transitado la mitad del invierno, el resultado pluvial es deficitario sobre la región núcleo. Los acumulados de estos 45 días, al igual que el año pasado, están muy por debajo de los valores medios estadísticos de los últimos treinta años. Las consecuencias se notan en las reservas de agua disponibles, que van perdiendo la recuperación obtenida a finales del otoño. Como suele ocurrir en el semestre frío, la franja mediterránea oeste es la primera en mostrar el desecamiento. Los lotes con mejor disponibilidad lo deben a la recarga de los perfiles en profundidad; la capa superficial ha sido desecada por la circulación reiterada de aire frío y seco.

En un contexto más global, el Pacífico Ecuatorial Central viene mostrando una leve disminución de su enfriamiento. Pero el índice que evalúa la anomalía de la temperatura superficial del océano (ONI) para el mes de julio no alienta una evolución a una neutralidad plena en verano. El valor del mes de junio había sido (-0,5) y el actual es de (-0,4) lo que indica escasa influencia del forzante sobre el régimen pluvial de Argentina. Pero debemos recordar que llevamos casi ocho meses con valores ascendentes pero negativos. Y no hay señales de cambios significativos: el océano en esa zona se mantiene moderadamente frío.

Aparte, los organismos internacionales cambiaron de proyección y muestran una probabilidad de evolución a Niña del 68%. El análisis de los registros históricos de índices similares de temperatura superficial en la transición otoño / invierno / verano muestra que en un 80% el forzante volvió a evolucionar en un enfriamiento o en un nuevo evento Niña, generalmente moderado o bajo. De todos modos, si bien los datos estadísticos van en ese sentido, es muy pronto para asegurar que el semestre cálido estará afectado por un evento seco, o de lluvias por debajo de la media. Es necesario esperar la evolución de los indicadores durante el mes de agosto para proyectar una tendencia definitiva.

Por otro lado el Atlántico presenta una realidad muy diferente: la temperatura superficial actual es más elevada que la normal. De seguirá sí durante la primavera podría compensar en parte la eventual posibilidad de un nuevo evento Niña con lluvias por debajo de lo normal.

Por el momento, en el corto plazo, el resto de la primera semana de agosto tenderá a ser más templada y con un ambiente más cargado de humedad por la persistente circulación del noreste. Estas condiciones posibilitarán el desarrollo de algunas precipitaciones durante el próximo fin de semana. Pero es poco probable que las lluvias esperadas escapen del patrón típicamente invernal que privilegia la franja este y los valores superen las medias del periodo.