INDICADORES CLIMÁTICOS


Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo

Algunas lluvias para la región

Podrían oscilar entre los diez y los treinta milímetros, aunque no se descartan eventos puntuales de mayor volumen.

Características cambiantes para la semana. Desde el comienzo del periodo de análisis, hasta el  sábado 5 inclusive, las condiciones serán de gran inestabilidad. Esto favorecerá la ocurrencia de precipitaciones en forma de chaparrones y tormentas aisladas sobre la zona GEA. Durante esos días habrá mejoramientos temporarios debido al proceso de formación de un sistema de baja presión al este de la Provincia de  Buenos Aires. Los montos de lluvia acumulados serán moderados, podrían oscilar entre los diez y los treinta milímetros, aunque no se descartan eventos puntuales de mayor volumen.

El viento presentará varios cambios de dirección. Una vez que el  sistema de baja presión se haya formado y desplazado hacia el este, la circulación asociada al mismo generará la rotación del viento al sector sur/sudoeste acompañada de un aumento en su intensidad a partir de la tarde/noche del sábado 5, principalmente en la zona este de la región GEA. Este cambio de dirección dará  lugar a un mejoramiento de las condiciones atmosféricas, que se tornarán más estables y sin precipitaciones.

La rotación del viento al sector sur provocará un marcado descenso de las temperaturas, tanto de los valores máximos como mínimos, que podrían alcanzar valores por debajo de los normales estacionales, principalmente el día domingo. A partir del lunes los registros comenzaran un paulatino ascenso hasta el final del periodo de pronóstico, pero dentro de los valores normales para la época.

La cobertura nubosa también presentará gran variabilidad, con momentos de cielo totalmente cubierto en coincidencia con la presencia de las precipitaciones.

La humedad en las capas bajas de la atmósfera será muy significativa desde el inicio del periodo de pronóstico favoreciendo el desarrollo de las precipitaciones.

 

Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo

Lluvias muy dispares en la región GEA

Entre el 27 de enero y el miércoles 2 de febrero las precipitaciones estuvieron prácticamente ausentes en la zona GEA.

Solo  se registraron lluvias en la Provincia de Córdoba y en el Oeste de Buenos Aires, con acumulados que oscilaron entre 2 y 5 mm.

Las temperaturas semanales fueron elevadas, principalmente, en la zona Norte de GEA donde los valores máximos alcanzaron entre  los 35º y 36ºC, en el este de Córdoba y en el centro de Santa FE. El valor más elevado se midió en la estación ubicada en Pozo del Molle, Córdoba, con 36,8°C.

Las temperaturas mínimas se ubicaron por debajo de los valores medios estacionales debido a la irrupción de aire frio de corta duración. Los valores más bajos del periodo oscilaron entre los 10 y los 11°C.

Con este panorama, la humedad del suelo se encuentra entre regular y adecuada en la zona centro/sur de la región GEA; en la zona centro/norte van de escasez a sequía. En los próximos quince días la zona centro/norte del área GEA necesitaría entre 120 y 140 mm para alcanzar el nivel óptimo de humedad edáfica, mientras que en la zona centro/sur entre 30 y 80 mm.

 

Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco

 

Algunos en condiciones de sequía podrían encontrar algún alivio

Las lluvias que provocaron el retroceso de la sequía que dominaba gran parte de la región núcleo quedaron atrás. Los últimos siete días, cambio de mes incluido, transcurrieron con altos niveles de humedad atmosférica pero sin el avance de sistemas frontales que los catalizara en forma de lluvia.

Solo la franja sudeste de la región pampeana, y más específicamente la costa atlántica bonaerense, se vio afectada por la circulación de un frente frío que dejó como saldo acumulados en el orden de los 5 a 25 milímetros.

Enero concluyó muy parecido a como se inició, con lluvias débiles, distribuidas de manera muy heterogénea que privilegiaron la franja este de la región pampeana y nuevamente postergan la franja central de la zona núcleo.       

El arranque de febrero no trajo cambios significativos y, a pesar de la continuidad de las precipitaciones durante la segunda quincena de enero, no en todos los sectores el beneficio fue el mismo. De todos modos el aporte pluvial estuvo. El ambiente húmedo y la menor hostilidad térmica generaron un escenario propicio para aprovechar el agua recibida, pero la dispar recarga de los perfiles se refleja en las reservas de agua en el suelo.

El sudoeste de Buenos Aires, el centro de Córdoba y el centro de Santa Fe quedaron fuera de una recuperación satisfactoria. Alcanzar una recarga plena de los perfiles requiere de un nivel de precipitaciones que será difícil de alcanzar en el corto plazo.

Los modelos de pronóstico muestran el desarrollo de lluvias y tormentas para lo que resta de la primera semana de febrero. Los acumulados previstos son débiles o moderados y concentrados sobre el centro de la región pampeana. Actualmente la variabilidad climática tiene el comportamiento de un equilibrista en la cuerda floja. Si se consolidan los pronósticos, aun con registros moderados,  algunos sectores que todavía mantienen condiciones de sequía podrían encontrar algún alivio.