Indicadores Climáticos


Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo

Chances de lluvias para lo que resta del jueves y  para el lunes a la tarde/noche

Ocurrencia de chaparrones y tormentas en la zona este de la zona GEA, principalmente en la provincia de Buenos Aires. El lunes 21 de agosto por la tarde/noche se espera el pasaje de un nuevo sistema frontal frío aumentando la probabilidad de precipitaciones.

Durante el jueves 17 la formación de un sistema de baja presión en la desembocadura del Rio de La Plata provocará la ocurrencia de chaparrones y tormentas en la zona este de la zona GEA, principalmente en la provincia de Buenos Aires. Las condiciones meteorológicas tienden a mejorar hacia el final del día, a medida que el sistema de baja presión se desplace hacia el este.

Durante la tarde del viernes 18 se espera la intensificación del viento, en forma temporal, del sector sudoeste y buen tiempo que se mantendrá hasta la tarde/noche del lunes 21 de agosto, momento en el cual se espera el pasaje de un nuevo sistema frontal frio aumentando la probabilidad de precipitaciones. Se prevé que las condiciones mejoren nuevamente en la mañana del martes 22 de agosto y se mantengan estables hasta el final del periodo de pronóstico.

Las temperaturas descenderán en forma generalizada a partir del jueves 17, alcanzando los registros máximos más bajos, entre 11 y 14°C, el día sábado. Posteriormente las temperaturas máximas vuelven a ascender y podrían alcanzar los 27 a 29°C. Este aumento térmico tendrá una corta duración, ya que a partir del martes 22 de agosto se producirá un nuevo descenso que se mantendrá hasta el fin de la semana de análisis. Los valores mínimos inicialmente serán bajos, entre 3 y 6°C, pero el enfriamiento será mayor el sábado 19, cuando los termómetros se ubicarán entre los 2 y los 5°C. El domingo 20 se registrarán los valores más bajos de todo el periodo y se estima que las marcas rondarán los 2 a 4°C. Al igual que con las temperaturas máximas la nueva irrupción de una masa de aire frío, el día martes, provocará un nuevo descenso de las mínimas, principalmente el miércoles 23 de agosto.

 

Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo

Escasas lluvias en la región

Entre el jueves 10 y el miércoles 16 de agosto se registraron escasas precipitaciones, con montos que no superaron los 5mm. El acumulado más alto, 2,6mm, se midió en la localidad de Chacabuco, en Buenos Aires.

Las temperaturas presentaron valores elevados para la época del año, con máximas entre 28 y 30°C, con un marcado gradiente sudeste/noroeste. El valor más alto, 30°C, fue el de Montes de Oca, en Santa fe. Las temperaturas mínimas fueron un poco más elevadas en el noroeste del área GEA, donde las marcas térmicas oscilaron entre 0 y 2°C. En el sur de GEA los valores estuvieron por debajo del punto de congelación y el registro más bajo fue el de la localidad de Gral. Pinto, donde la temperatura descendió hasta –2,6°C.

Con este panorama, y en función de las escasas precipitaciones recibidas, las reservas de agua en el suelo nuevamente disminuyeron levemente en el este de Santa Fe y centro/este de Buenos Aires, donde la humedad  edáfica es entre regular y adecuada. Las condiciones decrecen hacia el oeste manteniendo niveles de escasez, con un aumento del área en sequía en Córdoba.

Con estas condiciones hídricas, en el centro/oeste del área GEA se requieren, en los próximos quince días, acumulados entre 40 y 120 mm para alcanzar el estado óptimo de las reservas, mientras que en la zona este los valores se reducen a montos entre 10 y 40 mm.

 

Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco

Pocas posibilidades de lluvias en el oeste para lo que resta del mes

La primera quincena de agosto se termina con más de lo mismo. Solo el sudeste bonaerense y la Mesopotamia recibieron montos de lluvia destacables, aunque mucho más en el extremo norte del país, en Misiones, donde los acumulados superaron los 130 milímetros.

Aun con la temprana presencia de un calentamiento del Pacifico consistente con un Niño la disparidad de las reservas de agua en el suelo, de las regiones del oeste respecto del este, no pudo revertirse en lo que va del invierno y la situación no es peor gracias al predominio de circulaciones cálidas y húmedas del noreste más que por el aporte de agua de lluvia.

Los primeros quince días de agosto mostraron un comportamiento similar al de julio, una contienda repetida y frecuente entre flujos de aire cálido y frío que se alternaron sin provocar un cambio de atmósfera lo suficientemente efectivo para el desarrollo de precipitaciones que rompieran el patrón pluvial típico del invierno. Lluvias recostadas sobre la franja este del país.

El escenario actual no es el que se esperaba al inicio de la campaña fina, después de tres años de sequía, y con un comportamiento global favorable para una pronta transición de Niña a Niño. Se confiaba en una mejora pluvial, por encima de la media, a partir de agosto. Eso no está sucediendo, dando muestras de que las precipitaciones en la región pampeana dependen de un amplio grupo de variables y no de un solo indicador favorable. Lo confirma la distribución y volumen de las lluvias y comienza a padecerlo el trigo.

Los pronósticos de  las últimas 48 horas muestran un evento de lluvias importante. Sin embargo, una vez más, hay poca probabilidad de que las precipitaciones rompan la distribución lógica del semestre frío. Si este escenario se convalida se aleja la posibilidad de que la franja oeste del país recomponga, en lo que resta del mes, reservas de agua que actualmente se presentan muy similares a las del año pasado, con un requerimiento de agua superior a los 110 milímetros.