Lo que viene, el pronóstico para la semana próxima en la región núcleo

Fin de semana con mínimas que pueden llegar hasta los -7°C en región núcleo

El periodo comprendido entre el jueves 4 y el miércoles 10 de julio comienza con buenas condiciones meteorológicas que persistirán hasta el final del periodo de pronóstico en toda la zona GEA.

En lo que respecta a las marcas térmicas, se espera la irrupción de una masa de aire polar que provocará temperaturas extremadamente bajas, tanto mínimas como  máximas.

Los registros máximos tienden a descender a partir del jueves 4, principalmente en el centro/sur de la zona GEA donde se alcanzarán valores entre 8 y 10°C, y levemente superiores en el sector norte. Se espera un leve ascenso térmico entre el lunes 8 y el martes 9 pero, hacia el final del periodo de pronóstico, las temperaturas descenderán nuevamente alcanzando valores inferiores a los 10°C de forma generalizada en la zona GEA.

Las temperaturas mínimas se presentarán en descenso con el correr de los días, manteniéndose por debajo de 0°C durante seis de los siete días que comprenden el periodo de análisis. Los valores más bajos, de -5 a -7°C, se esperan en el centro y sur de la zona GEA entre el sábado 6 y domingo 7. En el resto del área, las mínimas rondarán los -2 a -5°C. Si bien se espera un leve ascenso térmico el martes 9 de julio las temperaturas mínimas oscilarán entre los -2° y 0°C. A partir del miércoles 10 se producirá un nuevo descenso térmico. Cabe destacar que se prevé la formación de heladas fuertes en la zona GEA durante la mayor parte del periodo de pronóstico.

Lo que pasó con el clima en la última semana en la región núcleo

Con temperaturas mínimas por debajo del punto de congelación

La semana comprendida entre el jueves 27 de junio y el miércoles 3 de julio no se registraron precipitaciones.

Las temperaturas máximas rondaron los 19 a 24°C en gran parte de la zona GEA, mientras que en el sector noroeste oscilaron entre los 24 y 26°C. El valor más alto, 26,9°C, se midió en la localidad de Colonia Almada, en Córdoba.

Las temperaturas mínimas estuvieron por debajo del punto de congelación en toda la zona GEA. Los valores variaron desde -3 a -1°C en forma generalizada, con registros puntuales inferiores a -4°C. El registro extremo del periodo, -5,2°C, se midió en la localidad de Hernando, Córdoba.

Con este panorama las reservas de agua en el suelo continuaron disminuyendo levemente respecto de la semana pasada. Las condiciones son regulares en una gran porción de la zona GEA, aunque en el sector sudeste presenta un núcleo de humedad adecuada y en el oeste es escasa.

Con las actuales condiciones, en los próximos quince días, se requieren entre 40 y 60 mm en el oeste del área GEA y 20 a 40 mm en el resto de la región. En el sector sudeste son necesarios 5 a 10 mm para mantener las buenas condiciones de humedad. 

Extensión GEA: O de Córdoba, N de Santa Fe, Santiago del E. y Chaco

Julio se inicia seco y con frío intenso

La transición mensual se produjo con una intensa circulación sur que consolidó el inicio de un invierno que se anticipa como más riguroso que los últimos.

Los primeros días de julio fueron una continuidad del ambiente frío y seco con el que concluyó el mes anterior. Las bajas temperaturas, potenciadas por la irrupción de una intensa masa de aire polar, marcaron récords el último fin de semana de junio siendo el más frío del año, con registros bajo cero generalizados, fuertes heladas y mucha nieve en la Patagonia.

Las precipitaciones ya se encuadran en el típico patrón invernal, haciendo más relevantes para la campaña fina los milímetros acumulados durante el otoño. Mayo y junio presentaron un comportamiento muy deficitario sobre el centro de la zona núcleo, ambos quedaron por debajo de los valores medios históricos. Pero las buenas lluvias de abril volcaron la balanza de forma positiva: en volumen y distribución de lluvias, el otoño 2024 supera a los trimestres del 2022 y 2023.

Más allá del escenario positivo que dejó como saldo el otoño, las reservas de agua comienzan a evidenciar la prolongada ausencia de lluvias. La adecuada humedad alcanzada por los suelos de la región pampeana viene cediendo área con cada semana que pasa, fundamentalmente en la capa superficial que es la más importante en el estadio actual de los cultivos.

Julio se inicia seco y con frío intenso y los pronósticos de corto y mediano plazo no son positivos en cuanto a un cambio de tendencia. Las precipitaciones permanecerán ausentes prácticamente toda la primera quincena del mes y, en los próximos días, la circulación de aire frío desde el sur hacia el centro del país se hará muy intensa y persistente, llevando los registros mínimos a varios grados bajo la línea de congelamiento. La primera década del mes la transitaremos casi en su totalidad con temperaturas bajo cero y sin aportes de agua para las siembras.