El éxodo hacia los activos refugio se consolida al ritmo de noticias que reavivan la incertidumbre sobre la estabilidad y recuperación económica mundial.

Los mercados financieros recibieron esta semana más de un revés de diferentes rincones del planeta, entre los que se destacaron:

Países de la Zona Euro: Las crecientes preocupaciones sobre la crisis de deuda en la zona euro sacudieron al mercado durante la semana luego de que la calificadora de riesgo Moodys recortara la nota de España y Grecia, disparando los precios de los CDS (Credit Default Swaps) sobre la deuda de ambos países y avivando los fantasmas de que la endeudada nación helénica pueda verse obligada a reestructurar su deuda, quizás antes del 2013.

China: El índice de inflación subió más de lo esperado intensificando las expectativas de políticas monetarias contractivas por parte de ese país.

Japón: El terremoto de gran intensidad que sacudió a Japón erosionó aún más el apetito por riesgo de los inversionistas. Las regiones afectadas incluyen grandes zonas industriales y de manufacturas, con muchas plantas de químicos y electrónicos, por lo que se espera un importante impacto sobre la anémica economía nipona, cuyo PBI revisado disminuyó un 0,3 por ciento el cuarto trimestre.

Países árabes: Continúa el nerviosismo por la inestabilidad en las principales naciones productoras de petróleo. Lejos está de solucionarse el conflicto en Libia mientras que comenzaron a producirse fuertes y reprimidos disturbios en Arabia Saudita. Si bien se esperaba que la OPEP anunciara un incremento en la producción de crudo, la organización emitió un comunicado considerando que el mundo tiene suficiente petróleo a pesar de la pérdida del crudo libio, apuntando a un aumento de la producción de otros miembros del grupo y la próxima desaceleración prevista de la demanda.

Si bien hasta la semana pasada la mayoría de los operadores coincidía en que las bajas respondían a una corrección, hoy y luego de perforar valores de soporte técnicos en los principales índices bursátiles del mundo, se preguntan si en realidad en lugar de estar frente a una corrección nos enfrentamos a un cambio de tendencia. Los volúmenes en Wall Street, cada vez más elevados en jornadas bajistas, podría respaldar esta última premisa.

Los recortes en Wall Street fueron durante la semana de 1,35%; 1,08% y 2,68% para el S&P500, Dow Jones y Nasdaq respectivamente. Este último índice se vio mayormente afectado debido a que las acciones tecnológicas sufrieron una venta masiva en Estados Unidos, lo que podría sustentarse desaceleración estacional que normalmente sufren las tecnológicas entre marzo y julio.

No se produjeron durante la semana drivers locales de gran envergadura que captase atención de los inversores, fieles seguidores de los acontecimientos externos. Solo cabe destacar las noticias en torno al Club de Paris y trascendidos que sostenían que las negociaciones estarían más "trabadas" que lo pensado o deseado, desmentidos luego por el Ministro de Economía Amado Boudou, quién sostuvo que Argentina podría reunirse en junio con los países miembros del Club de París para negociar el pago de una deuda cercana a los 9.000 millones de dólares.

El principal índice accionario del mercado local acumuló una pérdida semanal del -1,86%. Entre los papeles con mayores recortes semanales se encuentran Petrobras Brasil (-4.30%), Pampa (-3,89), Banco Francés (-3,41%) y Banco Patagonia (-3,28%) mientras que sólo subieron Edenor (+1,79%), Ledesma (+1,44%) y Petrobras Argentina (+1,82%).