Commodities

Despierta la comercialización local de maíz

Guillermo Rossi

Los futuros de maíz negociados en Chicago cerraron su séptima semana consecutiva de avance, acelerando la carrera alcista que habían iniciado en el mes de enero. Este movimiento, sin embargo, se debilitó al encontrarse con una resistencia en la zona de los u$s 5/bushel, equivalente a unos u$s 197/ton. En análisis de tipo técnico empleando gráficos de velas japonesas -tanto en forma diaria como semanal- se advierten señales bajistas, que en los próximos días podrían motorizar una toma de ganancias de los fondos especulativos, grandes protagonistas de la recuperación de los precios. Algo de esto se insinuó en la rueda del viernes.

Según datos de la CFTC publicados sobre el cierre de la semana, los agentes no comerciales que operan en Chicago incrementaron sus posiciones largas hasta 92.568 contratos, consolidando su expectativa alcista para los próximos meses. Este número representa el 5,5% del interés abierto total del mercado, siendo equivalente a 11,7 millones de toneladas.

Desde el punto de vista fundamental, el reciente desempeño del mercado se apoyó en el sólido ritmo de exportaciones de Estados Unidos de las últimas semanas y las perspectivas de caída del área sembrada en la campaña 2014/15. Las demoras en los trabajos de recolección en Argentina y Brasil, en parte por las condiciones climáticas adversas y la mayor participación de cultivos tardíos, brindaron sostén adicional.

Según datos del Departamento de Agricultura norteamericano, los compromisos de ventas al exterior de maíz totalizan 37,6 millones de toneladas a seis meses de la finalización del ciclo comercial. Si bien sólo la mitad de ese total ya se ha embarcado efectivamente, el volumen remanente para seguir colocando en el exterior es limitado a fin de cumplir con las previsiones de stock final. Una posibilidad es que el USDA reduzca su holgada proyección de consumo forrajero y asigne una participación mayor al comercio con el exterior. Sin embargo, el grueso de los operadores en Chicago sostiene que quedará menos maíz al finalizar la campaña que el anticipado en los números oficiales.

La escalada del petróleo hasta valores superiores a u$s 100 por barril contribuyó a explicar la tendencia positiva, por la mejora de los márgenes de molienda de la industria del etanol. Estos participantes contaron con mayor capacidad de pago y lograron capturar un volumen significativo de materia prima a lo largo de los últimos días, en el marco de un repunte en las ventas de los productores del medio oeste. El final de lo más crudo del invierno y la voluntad de desprenderse de los lotes remanentes antes de comenzar con los trabajos de implantación favorecieron una mayor disposición a comercializar la cosecha vieja que frenó la marcha alcista de los precios.

En tanto, a nivel local se sintió el empuje externo y los precios quebraron la barrera de los $ 1.300 por tonelada en las pizarras de la Cámara Arbitral de Cereales, favorecidos por una notable mejora de la capacidad teórica de pago de los exportadores que operan en esta región. De este modo, el equivalente en dólares de los precios para mercadería con entrega cercana alcanzó su valor más elevado de los últimos tres meses, reflejando la tirantez del mercado.

La plaza doméstica transita el empalme de cosechas con muy poco cereal remanente del año pasado y cierta demora en los trabajos de recolección, como consecuencia del exceso de agua de los últimos días y el retraso en las siembras de la última primavera. Según la estimación del Ministerio de Agricultura, el stock final al 28 de febrero resultaba de 1,75 millones de toneladas, aunque es probable que el grueso mayoritario de ese volumen se encuentre en poder de los exportadores. De hecho, estos participantes acumulan compras por unas 20 millones de toneladas pero sólo reportaron embarques por 18,5 millones desde marzo hasta febrero.

La reciente recuperación de las cotizaciones motivó una mayor actividad de mercado. La emisión de Roe Verde es ilustrativa al respecto, puesto que sólo en la jornada del viernes se autorizaron embarques por 1,2 millones de toneladas. Los principales receptores fueron Cargill con 300.000 toneladas, ADM con 150.000, Nidera con 125.000, Noble con 120.000 y Dreyfus con 100.000 toneladas.

Sin embargo, se advierte un importante descalce entre las condiciones que buscan los productores para cerrar negocios y las principales demandas de los exportadores. Mientras estos buscan cubrir sus necesidades de mercadería para afrontar la carga programada de las próximas semanas, la disposición a vender se orienta mayoritariamente a las posiciones diferidas hasta junio y julio. En este contexto, cobra gran relevancia el diferencial de precios entre los futuros con entrega en abril y en julio del Rofex.

De todos modos, la actividad en las terminales de la zona de Rosario muestra un profundo declive frente a otros años, tanto en lo referido al ingreso de camiones como a los planes de trabajo con buques que difunden las agencias marítimas. La carga de maíz programada hasta el 27 de marzo en los puertos del Up River asciende a sólo 264.500 toneladas. Entre 2010 y 2012 las exportaciones de maíz en marzo promediaron 1,5 millones de toneladas, mientras que en 2013 superaron las dos millones de toneladas. Al margen de la caída en los volúmenes, se advierte un importante retroceso en el ingreso de divisas, en parte por los menores precios.
Sin embargo, las expectativas de cosecha siguen siendo razonablemente buenas, aunque la caída interanual sería superior al 10%, fundamentalmente por la disminución del área sembrada. En esto último influye la menor proporción de siembras con anterioridad al 15 de octubre, fecha a partir de la cual se reduce considerablemente el potencial de rendimientos. Los maíces tardíos mantienen excelentes perspectivas, ya que pudieron eludir los episodios de mayor estrés termohídrico de los meses de diciembre y enero. No obstante, la escasa radiación solar por el exceso de días nublados de las últimas semanas se convierte en un factor que podría amenazar el potencial a futuro.