Finanzas

Pánico y desplome en los mercados financieros


Los mercados comenzaron la semana con todo. Las ganancias en bolsa del día lunes marcaron récords históricos tras la aprobación por parte del FMI y la Unión Europea de un billón de dólares para salir de la crisis en la que se encuentra inmerso el viejo continente. Sin embargo, con el correr de las jornadas, la incertidumbre sobre la capacidad del paquete de evitar un colapso fue paulatinamente enfriando al mercado.

Con la aprobación del paquete, Europa buscará salir de la peor crisis financiera que vivió el grupo desde su creación; mientras que Estados Unidos se recupera día a día de las secuelas que dejó la experiencia de su propia crisis financiera. Las políticas expansivas tomadas por el gobierno americano (más reticentes a hacer lo propio se mostraron los europeos) permitieron reactivar de a poco su economía. Si bien la caída de Lehman Brothers fue el inicio de una crisis financiera que posteriormente repercutió en la economía real, Europa está sumergida en una crisis financiera desarrollándose en medio de falencias estructurales de algunas economías de los posibles países miembros de la Unión, lo que hace que sea más complejo el camino para superar las vicisitudes actuales; además de requerir de mayores sacrificios, como los que se dispusieron a atravesar diversos gobiernos del grupo económico.

En esta semana España acaparó toda la atención. La agencia Standar and Poors estimó un riesgo potencial de 500.000 millones a 900.000 millones de euros, y esto es muchísimo. Además, vuelve a circular el término deflación, como se vio en el diario británico Financial Times en el que se reactivan temores deflacionistas sobre la economía española, castigada también por la decisión del BCE de dejar de comprar bonos españoles. España, al igual que Grecia, Portugal y hasta Inglaterra anunciaron medidas de ajustes para controlar el déficit fiscal. El temor radica en que esos ajustes terminen por profundizar la recesión y a su vez se frene la demanda mundial de, por ejemplo, materias primas.

Este panorama opacó los buenos datos económicos provenientes de la economía de Estados Unidos, especialmente aquellos que tienen que ver con el consumo. Las ventas minoristas durante abril estuvieron por encima de lo esperado, mientras que la confianza de los consumidores volvió a trepar por encima de las expectativas.

Las ganancias semanales fueron de 1,80% y 2,5% para el Dow Jones y el Nasdaq respectivamente. En Europa el Ibex de España logró recuperar sólo un 2,5% de la caída del 16% de la semana pasada.

En nuestra región, el Ibovespa registró una de las ganancias más discretas con un acumulado semanal de 0,6%, mientras que el índice Merval se revalorizó un 2% luego de perder más de un 10% la semana pasada. Si nos detenemos en el índice de acciones más representativo del mercado de capitales de nuestro país, podemos verificar que se sitúa en niveles previos a la crisis. Sin embargo, si observamos su evolución medida en dólares, como puede apreciarse en el gráfico, todavía le queda un largo camino por recorrer para alcanzar los valores de mediados de 2008 cuya brecha se encuentra en torno al 27%.

El mejor clima internacional, en comparación con la semana pasada, impulsó también a los bonos locales, aunque las ganancias del 2% a 5% mucho distan del recorte 12% al 16% que acumularon en la semana anterior.