Commodities

Semana de fuertes subas para el trigo

Guillermo Rossi

El panorama del mercado internacional de trigo no ha cambiado sustancialmente desde el punto de vista fundamental, aunque se destaca una mayor volatilidad de precios que en el promedio de los últimos meses. En Chicago los futuros continuaron su escalada y acumulan un avance promedio del 13,4% en lo que va del mes, favorecidos por las tensiones políticas en la zona del Mar Negro y la preocupación que genera la persistencia de clima seco en las planicies del sur de Estados Unidos. Sin embargo, la expectativa de que esta coyuntura se traduzca en un despegue de los embarques norteamericanos continúa sin concretarse en los reportes semanales de ventas al exterior.

En el informe mensual de oferta y demanda del USDA no se introdujeron novedades significativas. La proyección de hoja de balance en Estados Unidos no sufrió modificaciones respecto del informe anterior, lo que resultó en un stock final ligeramente inferior al que anticipaban algunos operadores privados. A nivel mundial, en cambio, se presentaron ajustes positivos en las cifras de producción de Australia, India y la Unión Europea que permitirían una pequeña mejora en la situación de abastecimiento mundial durante los próximos meses.

Los cultivos del hemisferio norte se aproximan al final de su período de hibernación, con expectativas menos optimistas que las que acompañaron la siembra en el último otoño. En las grandes llanuras del sur de Estados Unidos llovió la mitad de lo normal en los últimos 90 días, consolidando la presencia de un patrón de clima seco que podría impactar en el potencial de rendimientos. De hecho, en el estado de Kansas -el mayor productor del cereal de invierno- el 67% de la superficie se encuentra en situación de "sequía moderada" según el Monitor Semanal que publica la Universidad de Nebraska-Lincoln. Al parecer, los trigos que mejor se defiendan de esta adversidad estarían en condiciones de alcanzar buenos parámetros de calidad.

Al menos en Estados Unidos, es probable que la caída de los rendimientos se vea compensada con un aumento de la superficie aprovechable frente al año pasado. En aquella oportunidad, unas 4,5 millones de hectáreas -casi el 20% del total implantado- no pudieron cosecharse por los problemas climáticos heredados del dramático año 2012 para la economía rural norteamericana. En países de Europa y el Mar Negro, así como también en grandes productores como China e India, también se espera un incremento del área de trilla, aunque con rindes que en promedio terminarían por debajo de los buenos registros de 2013/14.

El área sembrada también experimentaría un crecimiento importante en Sudamérica, aunque con perspectivas algo más difusas. La evolución de la cosecha gruesa 2013/14 está dominando el escenario de mercado en esta región y hasta el momento sólo se cuenta con proyecciones muy generales para la cosecha fina 2014/15. La firmeza de los precios internacionales y la mayor competitividad que brinda la debilidad de las monedas regionales frente al dólar han incrementado la rentabilidad del cultivo frente a otras alternativas, como el maíz tardío en el sur de Brasil.

A nivel local, el ritmo de comercialización de la última cosecha continúa sin experimentar grandes sobresaltos, aunque la oferta se muestra ligeramente más permeable a realizar negocios. Gracias a la reciente mejora de los precios, la industria molinera ha logrado capturar mayor volumen de materia prima durante las últimas semanas y ya acumula compras por unas 2,5 millones de toneladas, superando largamente las 1,8 millones adquiridas por la exportación. Estos participantes han comprado en el mercado interno una cantidad mayor de la que en principio estarán autorizados a embarcar a lo largo de todo el ciclo comercial, en caso de que no haya una ampliación en el cupo de exportación que anunciaron las autoridades en el mes de enero. El volumen de operaciones a nivel nacional no supera las 200.000 toneladas semanales.

De cara a los próximos meses se espera que los exportadores reduzcan gradualmente su participación en el mercado doméstico, comenzando a concentrarse en la próxima campaña. De hecho, por estos días ya se percibe que la agresividad de estos jugadores es muy limitada, ofreciendo precios que se encuentran entre u$s 10 y 12 por tonelada por debajo de la capacidad teórica de pago que arrojan precios FOB en torno a u$s 340/ton.

Un eventual retiro de la exportación del segmento disponible atenuaría la competencia en la plaza y podría impactar en los precios, aunque la retracción de la oferta otorgará cierta firmeza. Asimismo, es crucial para el sostenimiento del mercado que la industria se mantenga activa en la operatoria, absorbiendo una proporción significativa de los inventarios que se vuelquen a la comercialización. Esto sólo podrá ocurrir si se produce una nueva ampliación del cupo de exportación de harina, establecido en 100.000 toneladas y del cual ya se emitieron Roe Verde por aproximadamente la mitad del total.

Los precios del trigo en condiciones Cámara con descarga inmediata encuentran un piso en $ 1.800/ton en la zona de Rosario, mientras que la industria molinera en el sur de Santa Fe ofrece valores ligeramente más atractivos aunque bajo distintas condiciones de calidad y plazos de pago. Por su parte, en Rofex continúa premiándose con entre u$s 10 y 15 por tonelada la entrega en el mes de mayo frente a marzo, diferencial que de alguna manera respalda a quienes todavía no han colocado sus lotes y esperan condiciones de mercado más atractivas.