Con la mirada puesta en el tramo final de la siembra en Estados Unidos, los precios de la soja se recuperaron con fuerza a lo largo de la semana. Los fondos que operan en el mercado de Chicago tomaron cobertura de sus posiciones vendidas y reafirmaron las subas. Sin embargo, desde el punto de vista técnico el mercado encontró presión vendedora en la zona de $ 9,80/bushel, cifra equivalente a u$s 360/ton por tonelada. Este factor condujo a una toma de ganancias en la rueda del viernes, aunque el poroto logró redondear su cuarta suba semanal consecutiva.

El avance de los trabajos de implantación en la zona central de Estados Unidos muestra un considerable retraso respecto de su patrón histórico, afectado por lluvias persistentes durante el último mes. Los estados de Kansas y Missouri, que conjuntamente abarcan una superficie de intención superior a 3,8 millones de hectáreas de la oleaginosa, sembraron sólo el 57 y 42% del área hasta el domingo pasado, siendo 85 y 79% los guarismos habituales para esta época del año. El temor al cierre de la ventana del cultivo alcanza también a una considerable extensión que necesita resiembras debido a los anegamientos, en el marco de lluvias por más de 200mm en el último mes. Con mucha superficie bajo el agua aumentan los temores de que mayor cantidad de los productores recurra a los programas gubernamentales de "siembra impedida" y finalmente desista de llevar adelante la producción para la campaña 2015/16. De hecho, las primeras especulaciones apuntan a que el USDA reducirá su estimación de superficie en el reporte trimestral de finales de este mes.

Esta situación, que impacta directamente sobre los futuros de la nueva cosecha, ha generado también consecuencias sobre el mercado disponible y la comercialización del remanente del ciclo 2014/15. El flujo de ventas de los farmers se ha ralentizado y con ello el ingreso de materia prima a las fábricas norteamericanas, que enfrentan una demanda muy firme de subproductos de soja. Los inventarios de harina de la industria se redujeron en las últimas semanas y el procesamiento del poroto no detiene su marcha, resultando en precios más altos en la búsqueda de equilibrar las fuerzas del mercado. En su informe mensual de este mes, la Cámara de la Industria Aceitera norteamericana - NOPA anunció un crushing de 4,05 millones de toneladas en mayo, marca 15% superior a la reportada en el mismo período del año pasado, siendo un récord histórico para ese mes.

La firmeza de los precios en Estados Unidos se trasladó rápidamente al mercado global y con ello al recinto de la Bolsa de Rosario. Las fábricas de esta zona se encontraron con mayor capacidad de pago y elevaron sus ofrecimientos en el intento de seducir a la oferta para reforzar su originación sin poner en riesgo los márgenes de operación. En etapa primaria, la necesidad de concretar ventas para cubrir compromisos financieros a poco de finalizada la cosecha generó un amplio volumen de negocios a lo largo de los últimos días, extendiendo la gran actividad del mercado. En la semana unas dos millones de toneladas cambiaron de manos bajo diferentes modalidades. Asimismo, datos oficiales indican que entre los días 3 y 10 de junio se le puso precio a 2,97 millones de toneladas de soja, dando lugar a un flujo de fondos de unos $ 5.500 millones desde los compradores a los vendedores.

El ritmo de industrialización de las plantas del Up River se ha recuperado y con ello la disponibilidad de harina para concretar los embarques programados. En Rosario y zona se esperan no menos de 50 buques para cargar con subproductos de soja durante las próximas tres semanas. El mercado FOB de los pellets mantiene puntas vendedoras por sobre los contratos de Chicago, aunque las primas se han debilitado fuertemente en las últimas semanas debido a la gran disponibilidad de soja en el circuito comercial en la búsqueda de salida exportadora. Si bien buena parte del inventario que ingresa es absorbido por las fábricas para su procesamiento, otro tanto está encontrando mercados por la vía de la exportación sin mayor transformación industrial. Desde abril hasta la primera semana de junio las exportaciones de porotos de soja acumulan 5,2 millones de toneladas, volumen que supera con creces a las 3,3 millones de toneladas embarcadas en el mismo período del año 2014.

A lo largo de los últimos días los valores del mercado fluctuaron entre $ 1.900 y 1.950 por tonelada con diferentes modalidades de descarga, con mejoras dependiendo de las condiciones generales del negocio. En operaciones con entrega diferida los compradores siguen ofreciendo premios sobre la entrega inmediata, reflejando el interés de los participantes por sortear las dificultades logísticas y ordenar la llegada del grano a las plantas y puertos. De hecho, el gran volumen de soja que se está negociando en poco tiempo y las consecuencias del conflicto entre trabajadores y las empresas del sector aceitero del mes pasado siguen incidiendo en los planes de trabajo de las terminales.

Los futuros de soja a noviembre alcanzaron en la semana el nivel de u$s 230/ton, cifra que tomada al tipo de cambio futuro esperado en Rofex equivale a poco más de $ 2.200/ton con entrega y pago a cinco meses. Esto implica que la operación diferida involucra una tasa implícita que ronda el 35% respecto del disponible, resultado de la pendiente en ascenso que se observa tanto en los futuros agrícolas como financieros, pese al inverso del mercado de Chicago. Esta estructura de valores abre el paso para el diseño de estrategias comerciales más sofisticadas entre las firmas operadoras del mercado de granos, en la búsqueda de obtener mayores beneficios.