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Soja: los precios no fueron atractivos y hay un 34% de soja sin vender


Los precios ofrecidos esta semana no fueron demasiado atractivos para los vendedores. Las bajas externas se trasladaron a los valores domésticos en casi todas las jornadas excepto el viernes, sesión en la que Chicago revirtió la tendencia y los precios locales hicieron lo propio. Los valores escuchados en el recinto oscilaron entre los $1.350 y los $1.370, aunque las ofertas pudieron incluso superar los $1.380.

Por la soja nueva, el valor ofrecido fluctuó entre los u$s 325 y 330 pero, al igual que para la mercadería disponible, como el nivel de precios descendió respecto a la semana pasada, el interés de los vendedores fue escaso.

De la cosecha 2010/11, el sector exportador y la industria han comprado 38,24 millones de toneladas, que representan el 76% de la producción total. De ese volumen, 32,9 millones (o el 66%) ya tienen precio firme. Por lo tanto, existen aproximadamente 17 millones de toneladas sin valuar -compradas sin fijar + sin vender - que representan el 34% de la cosecha total estimada por nuestra entidad en 50,3 millones.

Las compras de la soja que aún no se sembró (2011/12) se encuentran adelantadas respecto a campañas anteriores, como se observa en el gráfico adjunto y en al cuadro de Indicadores Comerciales.

Las exportaciones argentinas podrían beneficiarse en el cuarto trimestre del año ya que China, el mayor comprador de soja a nivel mundial, planea embarcar más de la mitad de sus importaciones desde Brasil y Argentina, ya que sus ofertas de precios son más competitivas. De una demanda estimada en 15 millones para el período octubre/diciembre, el país asiático estima adquirir cerca de 7 millones a los países sudamericanos, comparado con los 5 millones del año pasado. Se proyecta que las importaciones chinas crezcan más del 10% hasta los 58 millones anuales debido a que planea aumentar su producción porcina para contrarrestar las ajustadas ofertas domésticas.

La situación sería atípica para esa época del año, donde normalmente es Estados Unidos quien domina al mercado de exportación. Sin embargo, en el país del norte el clima adverso ha afectado al desarrollo de su producción y las estimaciones apuntan a una menor cosecha, lo cual quedará corroborado o no en el informe de oferta y demanda que el próximo lunes publica el USDA.

Una gran cantidad de soja en los stocks de Argentina y Brasil está proporcionando una fuerte competencia para Estados Unidos. Sin embargo, las ofertas desde Sudamérica sólo pueden cubrir transitoriamente la disminución de la soja norteamericana, como máximo hasta comienzos del 2012. Además, hay incertidumbre en torno al clima en Sudamérica ante la posibilidad de una nueva aparición del patrón climático La Niña. Asimismo, existen riesgos por el lado de la superficie ya que muchos productores podrían preferir maíz debido los altos precios actuales del cereal. Por ello, frente a una situación de ofertas globales ajustadas y donde las esperanzas están sobre Sudamérica, cualquier problema con los cultivos en Argentina o en Brasil podría dar impulso a los precios internacionales.

A pesar de las bajas, persisten los fundamentals alcistas

La renovada incertidumbre por la salud financiera global junto a la caída de las acciones de los mercados de todo el mundo dio motivo suficiente para que el martes, primer día de operaciones en el mercado de Chicago después del Labor Day, los futuros de soja comenzaran la semana con una fuerte presión a la baja. La apreciación del dólar, tras los temores por la profundización de la crisis de deuda en Europa y la decreciente economía estadounidense, actúa de manera negativa para los productos denominados en esa divisa, ya que pierden competitividad en el mercado internacional. La divisa norteamericana se ha fortalecido en 7 de los últimos ocho días.

Estas presiones llevaron a que el futuro más cercano cerrara el viernes a 520,5 dólares la tonelada y si bien en esa jornada la variación fue positiva, con subas de apenas 0,65%, el saldo semanal fue negativo, mostrando una baja del 1,4% respecto al viernes precedente.

Si bien la corriente bajista prevaleció durante la semana, la presión se suavizó de la mano de algunos fundamentals por el lado de la oferta. Como venimos observando en los continuos reportes semanales, los cultivos en Estados Unidos se han ido deteriorando debido a las condiciones climáticas adversas. El informe de este martes no hizo más que ratificar lo antedicho al recortar nuevamente el rating tanto de soja como de maíz. Si bien se recibieron lluvias en algunas partes del Medio Oeste el impacto fue sólo limitado ya que llegaron demasiado tarde. Según el USDA, sólo el 56% de las plantas de soja se encuentran en la categoría "buenas y excelentes" (versus 57% de la semana pasada y 64% del año precedente). También el desarrollo se encuentra por debajo de los niveles de años anteriores: sólo un 6% de las plantas están perdiendo hojas (comparado con el 17% del año pasado y el 13% promedio quinquenal).

Esto reafirma las preocupaciones respecto a una fuerte caída de la producción y por ende de las ofertas disponibles para el ciclo 2011/12. El próximo lunes, el USDA publica el informe mensual de oferta y demanda, en el cual revisa sus estimaciones locales e internacionales. Dada la situación actual, de continuo deterioro de los cultivos con motivo del clima, las expectativas apuntan a un recorte en la estimación de la cosecha sojera. En promedio, de acuerdo al relevamiento realizado por la agencia Reuters, se espera que la producción alcance los 82,33 millones de toneladas (rango que va desde 79,58 a 83,96) comparado con los 83,17 millones previstos en agosto por el gobierno y con los 90,6 del ciclo 2010/11.

Como consecuencia de que se espera una menor producción, surge otro factor bajista para la soja norteamericana y que proviene del hecho de que Estados Unidos está perdiendo terreno en el negocio de exportación, mayormente hacia China. Los consumidores del país asiático se están orientando a la soja, más barata, proveniente desde Sudamérica. A la luz de la menor cosecha, la demanda por soja estadounidense deberá ser racionalizada y parte de este consumo probablemente se transfiera a los países del hemisferio sur. Por ello cualquier problema con los cultivos en Argentina o en Brasil podría dar impulso a los precios internacionales.

En Brasil, los pronósticos climáticos para la segunda y tercera semana de septiembre no avizoran la llegada de las tan esperadas lluvias en las regiones de Mato Grosso y Mato Grosso do Sul, donde importantes déficits de humedad se han generado en los últimos tres meses. Esto pone en peligro las fechas óptimas para la siembra de soja y maíz. Pero más allá de eso, las previsiones siguen siendo optimistas ya que según algunas estimaciones locales la producción brasilera llegaría hasta el récord de 75,2 millones de toneladas (Celeres) o 75,3 (según Conab).