De la mano de buenos datos del mercado laboral estadounidense y señales de los bancos centrales, los mercados financieros no dejan de establecer marcas históricas. En el plano local, también los récords estuvieron a la orden del día.

La semana que finaliza estuvo marcada por una serie de datos y noticias que revitalizaron el impulso alcista de los mercados accionarios internacionales. Lo más relevante provino - como es ya costumbre - de los bancos centrales. Por un lado, la Fed ratificó que sostendrá las medidas de estímulo, mientras que desde el Banco Central Europeo se anunció, finalmente, una esperada reducción en la tasa de interés de referencia. Esta última fue de 25 puntos básicos - lo que llevó la tasa a un mínimo histórico del 0,5% - y se redujo el costo de las asistencias de liquidez a un 1%. Con esta medida la autoridad monetaria del viejo continente pretende facilitar el acceso de las pequeñas y medianas empresas al financiamiento y atacar un desempleo que alcanza niveles preocupantes.

A esto se agregó el anuncio de las estadísticas de empleo de los Estados Unidos correspondientes al mes de abril. Estas arrojaron la novedad de que durante el mes que terminó la economía norteamericana creó 165.000 puestos de trabajo no agrícolas, muy por encima de las proyecciones de los analistas (que auguraban unas 20.000 nóminas menos) y del registro correspondiente al mes de marzo, que fue revisado al alza confirmando 138.000 posiciones.

El resultado sorprendió favorablemente a los operadores y el mercado desató una respuesta que, rozando la euforia, tiñó de verde las pantallas. En un repaso por las principales plazas, el Dax alemán trepó un 3,9% en la semana (nuevo máximo en su historial) y las bolsas de Francia, España e Italia también subieron entre el 2 y 3%.

En Wall Street, los principales indicadores quebraron sus máximos anteriores, superando los 1600 puntos para el Standard and Poor's 500 y - en el intradiario - el nivel de 15.000 puntos para el índice Dow Jones. El Nasdaq, fuertemente influenciado por acciones de empresas tecnológicas, trepó un 3,7% respecto del viernes anterior y se ubica en niveles no alcanzados desde la burbuja de las "punto.com".

En simultáneo, los rendimientos de los bonos soberanos muestran un comportamiento que no parece condecir con el sostenido rally en renta variable. La tasa de los bonos del tesoro estadounidense a 10 años se mantiene en torno al 1,7%; permaneciendo cerca del mínimo histórico y por debajo de los registros observados en los momentos más crudos de la crisis financiera. Según parece, los inversores confían en una continuidad de la receta monetaria como disparador de la recuperación global.

En lo que hace al mercado local, el optimismo externo se contagió entre los operadores y se extendió una racha alcista, impulsada por inversores que buscan posicionarse en todo tipo de activos. El índice Merval también rompió máximos, finalizando la última jornada de la semana en 3.888 puntos, acumulando una mejora del 4,1% en cuatro ruedas.

Sin embargo, el Merval no fue el único récord de los últimos días. El apetito por el dólar llevó la cotización de la divisa en el mercado informal a niveles que - según publicaron distintos medios - arañaron los 10 pesos por unidad y la brecha que existe entre la cotización oficial y la denominada "blue" llegó al 90%, el máximo desde la introducción de restricciones a la venta de divisas a fines de 2011.

Entre las acciones más operadas, los papeles vinculados al petróleo y productos básicos lideraron las subas. El panel estuvo encabezado por Petrobras Brasil tuvo una suba del 11,4%, seguida de Siderar (+9,8%), YPF (+5,8%), Aluar (+5,7%), Pampa Energía (+4%) y Telecom (+3,6%).

El gigante de las comunicaciones volvió a estar en la primera plana de las novedades corporativas al estar entre las pioneras en la publicación de sus resultados del primer trimestre. Los libros de Telecom confirmaron la solidez financiera de la compañía, que incrementó sus ganancias en un 15% entre enero y marzo. Los papeles de Telecom acumulan un alza del 95% en lo que va de 2013.

Tenaris, la insignia de la bolsa argentina, también presentó sus resultados. Pero en este caso, el resultado no fue el esperado. Las ganancias de la empresa del conglomerado Techint estuvieron por debajo de las expectativas y se registraron retrocesos en algunos de los mercados más pujantes de demanda de sus productos (Oriente y América Latina). De esta manera, las acciones de Tenaris bajaron en New York (aunque la cotización porteña del papel marca una suba al esconder el incremento en el tipo de cambio implícito).

Del lado de las bajas, solamente quedaron las acciones del Banco Francés y Petrobras Argentina, con caídas del 0,7%.

Los títulos públicos en dólares acompañaron las subas, con preferencia por los extremos de la curva. Las mayores subas estuvieron en los Bonar VII, que vencen este año, con una suba del 3,9%; y de los bonos Par en dólares, que mejoraron un 3,2% y vencen en 2038.

Para concluir, esta semana se presentó una nueva alternativa de financiamiento en el mercado local. Se trata de la posibilidad de realizar operaciones de descuento de Cheques de Pago Diferido en el Mercado de Valores de Rosario, garantizando las operaciones con contratos de venta de granos con precio a fijar. Esto ofrece una opción más a los productores para gestionar necesidades de fondos para el giro de sus negocios, con flexibilidad para optar por el mejor momento para vender la mercadería, y agrega alternativas a los inversores de la región.