El maíz fue el gran protagonista de los mercados externos durante la presente semana, siendo además el que lideró la tendencia positiva de los futuros agrícolas cotizantes en Chicago. Los contratos con entrega en diciembre -representativos de la cosecha nueva norteamericana- finalizaron con subas semanales de u$s 11,8/ton. En la rueda del viernes esta posición atenuó su avance por una toma de ganancias.

Durante los últimos días los fondos especulativos acompañaron la recuperación de los precios, acortando el saldo de su cartera neta vendida. Según datos de la CFTC publicados el viernes, los agentes no comerciales que operan en el mercado de Chicago mantenían al día martes 13.227 contratos vendidos, equivalentes a 1,68 millones de toneladas. Esta suma representaba 2,4% del interés abierto del mercado de ese día.

La demora en la realización de los trabajos de implantación en Estados Unidos es verdaderamente preocupante. El lunes pasado el USDA sostuvo que sólo el 5% del área de intención ya se había sembrado, guarismo que se ubicó muy por debajo del 49% observado a la misma fecha del año pasado. En promedio, durante las últimas cinco campañas cerca de un tercio del maíz norteamericano se encontraba sembrado a finales de abril. Los registros históricos dan la pauta de que se trata de una de las campañas más demoradas de las últimas décadas.

Con posterioridad a ese reporte del Departamento de Agricultura norteamericano, el clima extremadamente frío y las tormentas de nieve que recibieron diversos distritos impidieron un avance significativo de los trabajos, esperándose condiciones más propicias recién para la próxima semana. Este factor, sumado al reciente debilitamiento del dólar, permitió que el cereal se negocie a sus precios más altos del último mes en el mercado disponible norteamericano.

Las plantas industriales mantuvieron firmes sus bases e incrementaron la molienda para biocombustibles durante los últimos días, favorecidas por el encarecimiento del precio del petróleo. Según datos de la oficina de Información Energética de Estados Unidos, la producción semanal de etanol promedió 857.000 barriles diarios, la cifra más elevada de los últimos diez meses. En el mes de abril la producción trepó un 6%, aunque permanece muy por debajo de los niveles de años anteriores.

En tanto, las exportaciones del país del norte permanecieron débiles, enfrentando creciente competencia desde Sudamérica. El USDA reportó el día jueves embarques de maíz por 329.264 toneladas de la cosecha actual y 655.969 toneladas de la próxima campaña, en ambos casos dentro del rango esperado. Transcurrido los primeros ocho meses de la campaña, Estados Unidos embarcó apenas 12,5 millones de toneladas del cereal, la mitad de lo que había exportado a la misma altura del ciclo en las cinco campañas precedentes.

El final de la campaña se avizora muy ajustado de oferta y con muy lento ritmo de ventas entre los productores norteamericanos. En el próximo verano los inventarios se encontrarán en su nivel más bajo de los últimos 17 años y los precios de contado permanecerán muy firmes, aunque a medida que avance la siembra norteamericana se relajará la tensión sobre los futuros que vencen a partir de diciembre.

En otros países del hemisferio norte la siembra de los cultivos de primavera se está desarrollando sin mayor demora, con excepción de algunos países de Europa occidental castigados por el exceso de lluvias y el clima frío. Tanto en la Unión Europea como en países del Mar Negro se cuenta con formidables expectativas de producción, dados los abundantes niveles de humedad de los suelos. Según el Consejo Internacional de Cereales, la producción de la UE podría trepar un 17% hasta ubicarse en 65,8 millones de toneladas.

En tanto, en nuestro país los trabajos de recolección se ubican en el 52% del área hacia comienzos de mayo, según el informe semanal del Ministerio de Agricultura. No obstante, las precipitaciones de la segunda mitad de la semana frenaron el ritmo de los trabajos. Cabe recordar que esta entidad trabaja con una estimación de producción de 25,7 millones de toneladas, ligeramente por encima de las 25,3 millones que estima GEA - Guía Estratégica para el Agro. Durante la próxima semana, esta Bolsa de Comercio dará a conocer su nueva estimación.

La comercialización de maíz se encuentra muy avanzada, pero todavía muestra activa participación de la exportación. Estos participantes acumulan compras por 14,5 millones de toneladas, más de 3 millones de toneladas más de lo que habían adquirido a la misma altura de la campaña pasada. En los primeros dos meses de la campaña se embarcaron más de 5 millones de toneladas.

El mercado local fue de menor a mayor durante los últimos días, comenzando con precios en torno a u$s 170/ton con entrega en junio el día lunes, pero acabando el viernes con valores cercanos a u$s 185/ton y varios participantes mostrando interés en la mercadería. En esta última jornada, el recinto de esta Bolsa negoció más de 60.000 toneladas del cereal, ya que muchos vendedores reaccionaron ante la llegada de los precios a sus máximos de las últimas seis semanas. Esta circunstancia incrementará las emisiones de Roe Verde en días venideros, que acumularon sólo 129.500 toneladas durante la presente semana.

En tanto, la plataforma electrónica de Rofex acumuló operaciones con maíz por 5.670 toneladas. Al llegar el viernes, los contratos con entrega en mayo ajustaron a u$s 180/ton, cifra equivalente a $ 934,4/ton al tipo de cambio garantía. Sin embargo, en el recinto de operaciones de la Bolsa trascendió que un comprador realizó negocios pagando hasta $ 955/ton con entrega hasta el lunes. El precio FAS teórico oficial se encuentra en $ 986/ton.