Finanzas

China y balances impactaron en los mercados globales

Leandro Fisanotti

Bajo presión por una temporada de balances corporativos de las principales cotizantes en los Estados Unidos, que pasó de un tono neutro a ser decepcionante en muchos casos, los mercados accionarios de referencia a nivel global retrocedieron, tomando ganancias tras los máximos alcanzados en las primeras ruedas del mes.

El comienzo de la semana se presentó bajista, con una jornada en la que las principales plazas vivieron un lunes negro tras conocerse un dato negativo respecto al crecimiento de la economía china. Sin alcanzar las expectativas de los analistas, y dando señales de una desaceleración en el nivel de actividad, el PBI de China creció durante el primer trimestre de 2013 un 7,7% en comparación con igual período del año anterior. Este valor no logró empardar el 8% esperado por los inversores y disparó órdenes de ventas tanto en activos financieros como commodities. En particular, el oro experimentó su mayor caída en tres décadas.

En lo que respecta a los mercados del viejo continente,   el aletargamiento mostrado por parte de las autoridades para introducir acciones que marquen un rumbo claro en la salida de la delicada situación económica y política renueva preocupaciones entre los inversores. Esto se plasmó en dos indicadores claros: por un lado, el índice de confianza de los inversores en Alemania – que puede ser tomado como referencia válida para el conjunto de los países europeos – cayó a su nivel más bajo desde el mes de enero. Por otra parte, manteniéndonos en el mercado germano, la licitación de bonos a 10 años realizada el martes fue colocada a una tasa del 1,28% - por debajo de la colocación anterior - y estuvo notoriamente sobresuscripta. Si bien parte de la demanda puede explicarse por un arbitraje de bonos japoneses a bonos alemanes, el escaso rendimiento exigido a estos títulos (considerados refugios de valor) debe interpretarse como una señal de cautela por parte de los grandes jugadores.

De esta manera, los principales índices europeos arrojaron un saldo semanal con caídas que alcanzaron el 3,7% para el Dax. El Cac parisino cedió un 2,1% y el Ibex un 1,5%.

En Wall Street, los resultados corporativos siguen siendo el principal factor de influencia en el ánimo inversor. Si bien la temporada de balances correspondiente al primer trimestre del año había tenido un comienzo favorable, poco a poco aparecieron decepcionantes reportes de algunas de las principales empresas. Corporaciones de la talla de IBM, General Electric y McDonald’s no estuvieron a la altura de lo esperado y presionaron los índices a la baja. El Dow Jones concluye la semana con una caída del 2,1%, Standard&Poor’s 500 lo hace en un 2,1%, en tanto que Nasdaq cede el 2,7%.

Antes de pasar a la plaza doméstica, una escala obligada resulta el mercado brasilero. En línea con lo esperado, el Banco Central carioca ajustó a la suba su tasa de interés de referencia por primera vez en dos años. La medida estuvo motivada por una resistencia a la baja en la tasa de inflación y – si bien no sorprendió – generó algunas preocupaciones en los sectores productivos por su potencial impacto en el crecimiento de la economía. El índice Bovespa retrocedió un 1,8% en la semana que finaliza y acumula en el año una caída del 11,4%.

En lo que respecta al mercado local, el índice Merval tuvo una caída del orden del 0,5% respecto del viernes pasado, al anotar un cierre en 3.444,5 puntos. Las principales subas se dieron en Siderar, que mejoró un 4,9%, Aluar (+2,5%), Petrobras Brasil (+2,4%), Sociedad Comercial del Plata (+2,3%) y Tenaris (+2%).

La siderúrgica del conglomerado Techint entusiasma a los inversores al esperarse que el balance correspondiente al primer trimestre del año resulte favorable. Si se analiza el resultado anterior, correspondiente al último parcial del año pasado, la empresa mostró pérdidas significativas, aunque explicadas por los resultados de inversiones en compañías asociadas. Esto dejó en segundo plano una mejora en los resultados operativos de la compañía. Ante la expectativa de que – sin el lastre de los resultados por participaciones en otras empresas – el resultado se destaque en forma favorable, los inversores apuran la toma de posiciones en este papel. En lo que va del mes, Siderar acumula una suba del 10,9%. Además se aprobó un dividendo del 8% para los accionistas de la compañía.

Del lado de las bajas estuvieron los papeles de YPF (-4,9%), Pampa Energía (-4,7%), Petrobras Argentina (-3,2%), el Grupo Financiero Galicia (-1,9%) y el Banco Francés (-1,7%).

La petrolera estatal no termina digerir el impacto que tendrá la necesidad de importar combustibles, producto de la caída en la capacidad de refinación que enfrenta tras el incendio en la planta de Ensenada. Desde la compañía se tomaron medidas que morigerarán el impacto en los resultados (mayor producción en las plantas de Luján de Cuyo y Plaza Huincul, ventas de crudo a empresas locales – Oil Combustibles y Enarsa – y exportaciones del hidrocarburo), pero difícilmente se logre neutralizar en forma completa efecto sobre la rentabilidad de la empresa para el ejercicio en curso. Entre los títulos públicos, los cupones vinculados al PBI en dólares estuvieron activos, ganando entre 1,8% y 2,2% según la legislación de cada emisión. Al cierre de la semana se publicó el EMAE correspondiente al mes de febrero, que arrojó una variación del 2,3%, por encima del 1,5% esperado.