Commodities

Semana muy negativa para el maíz

Guillermo Rossi

Los futuros de maíz cotizantes en Chicago comenzaron el mes de febrero con gran debilidad y precios en baja, ante el profundo retroceso de la demanda frente a la expectativa de una gran cosecha sudamericana, que permitirá expandir la oferta global. En el curso de la presente semana las bajas resultaron de u$s 10,6/ton para el contrato con entrega en marzo, que ajustó el viernes a u$s 279,1/ton.

El comportamiento descripto parece contradecir las expectativas que formulaban muchos operadores al promediar el año pasado, cuando una sequía extrema castigó las regiones productoras del cinturón maicero y contrajo fuertemente la cosecha, llevando los inventarios de Estados Unidos a su nivel más bajo de los últimos 17 años. Semejante reducción de oferta -cercana a 100 millones de toneladas- hubiese mantenido los precios en niveles históricamente récord de no mediar la profunda retracción de la demanda que se observó en los últimos meses.

Por estos días, pocos commodities en el plano mundial presentan un panorama más incierto que el maíz. Los primeros relevamientos plantean que habrá un incremento del área en la campaña 2013/14 en Estados Unidos, motorizado por el excelente margen que permiten los precios del cereal de la nueva campaña. Según la firma Lanworth, Estados Unidos está en condiciones de alcanzar una cosecha de 350 millones de toneladas. Los trabajos de siembra comenzarán en el mes de abril y las primeras estimaciones oficiales del USDA se publicarán en mayo, aunque a finales de este mes se conocerán las primeras tendencias en el Outlook anual de dicho organismo.Sin embargo, no es posible saber si la oferta se ampliará lo suficiente para relajar el mercado y permitir un reverdecimiento de la demanda. Tanto el consumo forrajero, como el etanol y la demanda de la exportación se encuentran en profundo declive.

Respecto de esto último, es ilustrativa la inspección de los resultados financieros que presentó el martes la multinacional Archer Daniels Midland (ADM), que sorprendieron en Wall Street. En el trimestre que finalizó el 31/12, la compañía informó ganancias por u$s 510 millones, superando los $ 80 millones obtenidos en el mismo período del año 2011. Según palabras de su directora ejecutiva Patricia Woertz, la molienda de soja está funcionando a todo vapor y la demanda de harina de soja se mantiene muy firme, pero la empresa se vio golpeada por los márgenes negativos y la débil demanda de etanol, que elaboran a base de maíz. El margen de procesamiento trimestral cayó a u$s 3 millones, desde los u$s 207 obtenidos a igual fecha del año pasado. La firma está más orientada al mercado norteamericano que sus rivales y no tiene activos en Argentina.

Durante el transcurso de la semana la operatoria fue cauta y el volumen permaneció por debajo de su media usual, ante la expectativa generada por la publicación de nuevas estimaciones de producción y consumo del Departamento de Agricultura norteamericano.

Al llegar el viernes, el organismo efectuó algunos cambios en la hoja de balance tanto en EE.UU. como para el resto de los principales países productores y exportadores. En el país del norte se practicó una previsible reducción a la proyección de exportaciones, atendiendo a que el ritmo de embarques de las últimas semanas permaneció bien por debajo de su nivel esperado. La nueva previsión espera ventas externas por algo menos de 23 millones t. Con estos números se espera llegar al cierre de la campaña con inventarios por 16,1 millones de toneladas, equivalentes a poco más de 20 días de consumo. Esta cifra ejerció presión sobre los precios por encontrarse por encima de lo esperado.

En tanto, las estimaciones de cosecha de Brasil y Argentina se ubicaron por encima de lo que anticipaban los operadores, ejerciendo presión adicional sobre el mercado. El USDA redujo su expectativa de cosecha argentina hasta 27 millones t, pero elevó hasta 72,5 millones su cálculo para Brasil. La campaña mundial 2012/13 cerrará con una producción global de 854,4 millones t y comercio total por algo más de 90 millones t, denotando una caída del 23% respecto del 2011/12.

Estos números causaron escaso impacto en la comercialización de nuestro país, ya que trascurrió una semana con poco interés de los exportadores por cerrar negocios. Sólo en las ruedas del lunes y martes se percibió la necesidad de un comprador tradicional, que buscaba el cereal pagando valores a partir de u$s 185/ton con entrega desde marzo en adelante. En los mercados a término también hubo pocos negocios.

Las cifras oficiales que semanalmente se dan a conocer muestran que se han comercializado 11,5 millones t de las 2012/13, con poca mercadería intercambiada en los días recientes. En la última semana de enero se compraron algo menos de 70.000 t. Cabe destacar que a igual fecha del año 2012 los negocios ascendían a sólo 6,1 millones t.

Las perspectivas de producción se encuentran en descenso debido a la falta de lluvias en la zona núcleo, lo que desalienta las expectativas de una eventual ampliación del saldo exportable. En este contexto, no hay ánimo para salir a buscar nueva mercadería y la experiencia observada en el mercado del trigo es ilustrativa al respecto.

La situación climática de los últimos días ha afectado más a la soja que al maíz, aunque este último empieza a mostrar señales de deterioro en sus lotes de desarrollo más tardío. En la zona núcleo una amplia proporción del territorio exhibía condiciones de sequía a finales de enero y desde entonces sólo hubo lluvias dispersas en el primer día del mes. Los trabajos de cosecha apenas han comenzado, pero se acelerarán en las próximas semanas.

No se espera una reactivación del mercado si no hay novedades en materia de regulación comercial. La UCESCI se ha quedado con poco margen para seguir emitiendo ROES de la modalidad 365 días, destacándose que en la última semana los permisos llegaron a sólo 61.100 toneladas.