Commodities

Trigo: el trigo argentino no muestra la realidad externa


El mercado local de trigo mostró algunos cambios para los únicos precios conocidos, los correspondientes a la nueva cosecha.

La semana comenzó sin valores de referencia pagados por los exportadores hasta el miércoles cuando apareció uno de ellos ofreciendo u$s 170 por el cereal con entrega diciembre. El valor mostró una mejora respecto de la semana anterior y algunos negocios se realizaron para aprovechar los valores.

Los precios mencionados no se mantuvieron durante el resto de la semana ya que bajaron hasta los u$s 160, con rumores de poder alcanzar los u$s 165.

Estos valores están muy por debajo del valor teórico que se construye a partir del precio FOB que se conoce del trigo de la próxima campaña.

El precio FOB mínimo oficial para entrega noviembre/ mayo está en u$s 305, sin haber mostrado modificaciones desde principios de julio cuando el mercado internacional tuvo cambios por el contexto de oferta y demanda. Partiendo de dicho valor se llega a un FAS teórico de u$s 219.

Sin embargo, el precio oficial dista del publicado por privados donde hay solo oferta vendedora a u$s 300, con algunos días que aparece la oferta compradora a u$s 280.

Con una referencia promedio de u$s 290, el FAS teórico del trigo nuevo estaría en niveles de u$s 204, también muy por arriba de los u$s 170 que se puede negociar en el mercado forward o en el institucionalizado de futuros.

La diferencia de más de u$s 30 entre la teórica y la práctica no hace más que trasladar la incertidumbre del mercado al sector productor que está sembrando el cereal.

Para la campaña 2011/12 los datos oficiales señalan una cobertura de 4,7 millones de hectáreas, un incremento del 7,4% respecto de la campaña precedente, según los datos del informe mensual publicado esta semana.

La diferencia se atribuye a las mejores condiciones edáficas que muestran los suelos para el avance de las siembras que alcanzan el 79% de la cobertura según datos oficiales.

Los guarismos no muestran las intenciones iniciales y serán las finales ya que muchos productores

continúan evaluando el contexto del mercado.

Es el desarrollo del mercado de trigo de los últimos años el principal limitante a un crecimiento mayor en la superficie de cobertura.

Muchos son los productores que mantienen existencias de trigo de la presente campaña sin poder contar con la posibilidad de ingresarla al circuito comercial.

De una oferta total de 16 millones de tn, tal cual se muestra en el cuadro adjunto donde se expone el balance de oferta y demanda que publica mensualmente el Ministerio de Agricultura, se estima ya comercializado 11,62 millones de tn o casi el 73%.

Del volumen negociado, unas 7,62 millones de tn fueron compradas por el sector exportador para cumplir con los 7,27 millones de tn que se consideran autorizados de ROE Verde.

En la semana transcurrida se autorizaron nuevos Roe de trigo por unas 61.861 tn, un volumen inferior a la semana anterior y sin poder conocer la asignación a la campaña.

Para la presente campaña el saldo excedente para autorización sería escaso mientras que del cupo que un día anunció algún funcionario del cereal de la próxima cosecha de 3 millones de tn se podrían haber autorizado unas 75.000 tn como se muestra de la estimación en el cuadro de ROE.

Para poder activar el mercado de futuro con entrega será necesaria una mayor celeridad en cuanto a las autorizaciones de exportación.

Igualmente se puede observar en el mercado mundial que la competencia de la oferta de trigo es creciente, con precios más bajos desde los países de la ex Unión Soviética y una presión de cosecha en Estados Unidos.

El primer exportador mundial del cereal encuentra competencia y Argentina solo puede acceder a mercados regionales donde los precios ofrecidos tienen ventajas por beneficios arancelarios y de fletes.

La demanda de nuestro principal comprador, Brasil, está tranquila ante la proximidad de la cosecha y la oferta que encuentra proveniente de diversos países vecinos.

Argentina es el principal abastecedor brasileño, pero en los últimos años con las reglamentaciones que limitaron las exportaciones amplió sus mercados vendedores a Uruguay y Paraguay.

Estos países ganaron participación del mercado brasileño que Argentina dejó de abastecer, con precios competitivos y estabilidad en los negocios.

El contexto local, en relación al mercado exportador de trigo llevó a perder participación y posibilidad de acceder a mejores cotizaciones que lleguen al productor para incentivar las siembras.

El trigo volátil entre el dólar y la exportación

El mercado agrícola transcurrió la semana con mucha volatilidad producto de elementos externos y de la evolución del clima en los países productores que definirá la cosecha para el 2011.

En el caso del trigo, las cotizaciones de los mercados estuvieron atadas a la evolución del dólar y el impacto en la competitividad del producto en el mundo.

La firmeza del dólar genera ventas de posiciones frente a un contexto con menos demanda frente a la mayor oferta que se genera por el avance de la cosecha en Estados Unidos y las mejores perspectivas en otros países del hemisferio norte.

Según el USDA el trigo de invierno está cosechado en un 68%, debajo del 70% del año pasado a la misma fecha y del 72% del promedio de los últimos cinco años.

En cuanto al trigo de primavera, la condición de los cultivos muestra un 73% en la categoría de bueno a excelente, sin cambios respecto de la semana previa pero muy por debajo del 82% del año pasado a la misma fecha.

El contexto de los cultivos es dispar según el tipo pero la proyección total que mostró el informe mensual del gobierno la semana previa fue de una mayor producción aunque debajo del año pasado.

La menor cosecha también se replica en Europa y otros países del norte aunque con un contrapeso importante en la recuperación de Rusia y Ucrania.

Estos últimos con una mayor oferta tendrán mayores excedentes para volcar al mercado y aumentar la competencia en los países exportadores.

La agencia estatal de compras de Egipto, mayor importador mundial de trigo, señaló que desde el próximo mes incluirá a Ucrania en la lista de oferentes aprobados.

La semana pasada Egipto compró trigo ruso y las noticias de la presente vuelven a mostrar su mayor actividad en el mercado global.

Las ofertas de trigo provenientes de Rusia y Ucrania reaparecieron agresivamente después de un año de ausencia, capturando la mayor parte de los negocios internacionales. Rusia, el tercer mayor exportador mundial de trigo, dijo que planea exportar 16 millones de trigo en el ciclo 2011/12, por encima de los 12 millones proyectados por el USDA.

Así el trigo empieza a tener más competencia y Estados Unidos podría disminuir su participación en el mercado mundial.

En el grafico que se adjunta se muestra la evolución del comercio mundial de trigo donde en las últimas campañas el volumen aumentó considerablemente pero la participación de Estados Unidos disminuyó, siendo en el 2009/10 la menor para recuperar en el 2010/11.

Sin embargo, las proyecciones para el 2011/12 muestran una baja hasta el 24% y de casi 4 millones de toneladas en volumen.

Los informes relacionados muestran una actividad exportadora bastante lenta.

Las inspecciones de embarque de trigo totalizaron las 590.600 tn, en línea con el registro de la semana pasada pero debajo del año anterior a la misma fecha. El acumulado del año comercial es de 3,9 millones de tn frente a los 3 millones del 2010.

En cuanto a las ventas semanales, se reportaron nuevos negocios del cereal por 403.500 tn, dentro del rango esperado por el mercado de 300.000 a 500.000 tn pero con un ritmo más lento que el año pasado a la misma fecha.

Esta demanda igualmente ayudara a Estados Unidos para recortar los niveles de stocks del cereal que había recuperado hace dos campañas y en la pasada y en la presente comenzó a absorber.

El contexto del cereal igualmente es muy volátil con componentes de oferta y demanda que no muestran complicación a nivel global pero con impacto en relación al comportamiento de la economía global.

Las crisis, con el impacto en las monedas, es un elemento que afecta principalmente al trigo entre los commodities agrícolas.

La profundización de la crisis de deuda en Europa y en Estados Unidos aumenta la aversión al riego de los inversores y pesa sobre todas las commodities.

Además, el euro cayó contra el dólar y la firmeza de la moneda estadounidense contribuyó a la debilidad generalizada de las commodities. Un dólar fuerte hace a las commodities menos atractivas para los inversores que buscan cobertura contra la inflación.