Los futuros de trigo cierran con caídas presionados por el cierre de posiciones y toma de ganancias por parte de los fondos de inversión luego de haber alcanzado máximos en ocho años en la jornada anterior. Sin embargo, la magra producción de trigo de primavera en Rusia y Estados Unidos continúa dando sostén a los precios. Además, la demanda global por el cereal se mantiene robusta, y las exportaciones rusas (el principal exportador) exhiben un ritmo más aletargado al previsto, generando cierta escasez de suministros a nivel global.

Los contratos de maíz concluyen la jornada con ganancias y cierran su cuarta rueda consecutiva al alza. Las demoras en la cosecha estadounidense causadas por lluvias en amplias regiones del medio oeste norteamericano generan cierta escasez corto plazo en el mercado local, lo cual impulsa a los precios. Además, exportadores privados anunciaron nuevas ventas externas por 279.000 t con destino México, lo cual también apuntala a las cotizaciones.

Los futuros de soja cierran con subas. Al igual que el maíz, las demoras en la cosecha generan cierta escasez de corto plazo e impulsan a los precios. Además, exportadores privados anunciaron ventas por 132.000 t hacia destinos desconocidos, en tanto el USDA reportó ventas por otras 222.000 t. Estos indicios de una dinámica demanda externa sumaron a la inercia alcista. Sin embargo, cuestiones técnicas limitan las subas.