El cereal cierra ampliamente negativo, de la mano del resultado del último Informe Mensual de Oferta y Demanda Mundial (WASDE) del USDA, que indica una suba en las proyecciones de producción, comercio y stocks finales a nivel mundial, lo que tendió a relajar de cierta manera la preocupación por el abastecimiento en el 2023 y presionó a la baja las cotizaciones. A su vez, si bien Estados Unidos permanece casi sin cambios en sus estimaciones, la competitividad exhibida en el trigo ruso a contramano de los altos precios del trigo norteamericano también influyó en la baja de los precios. 

El grano amarillo cerró el día en negativo, alcanzando pérdidas de hasta US$ 2,5/t, tras el resultado del WASDE que estimó mayor producción, mayor uso y mayores stocks finales en Estados Unidos, lo que claramente sumó presión bajista al mercado. Sin embargo, la producción maicera a nivel mundial para el ciclo 2022/23 se pronostica ligeramente inferior, con menor comercio y stocks más pequeños en relación con la estimación del mes pasado, lo que limitó las bajas e hizo operar en positivo a las posiciones lejanas durante el transcurso de la jornada.

La oleaginosa finalizó el día mixto, ganando 1,16% y perdiendo hasta 0,6% en las lejanas, debido a que el USDA estimó que a nivel mundial la producción de soja cae en 0,5 Mt de cara a la nueva campaña, por lo que el efecto alcista se reflejó en las posiciones cercanas. Por otro lado, las estimaciones respecto a la soja estadounidense fueron a contra mano de lo previsto en el informe anterior, y el país norteamericano informó mayor producción, mayor crushing y mayores stocks finales, lo que tendió a llevar a la baja a las cotizaciones con posiciones más lejanas.

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