Commodities

Buen año para la soja, aunque rezagada respecto a los cereales


Es inevitable que al llegar el fin de un nuevo año, realicemos un balance de lo ocurrido para vislumbrar lo que vendrá. En este sentido, los mercados de commodities en general y de granos en particular gozaron de un año excelente en materia de precios, siendo los problemas por el lado de la oferta quienes marcaron la senda alcista, con el trigo liderando las mejoras durante gran parte del año. La característica en común fue el clima, determinante principal de las subas por el lado de los fundamentals.

Volviendo a los precios, todos los productos registraron subas, siendo la soja la más retrasada si la comparamos con los otros granos. Así por ejemplo, la variación anual de la oleaginosa fue del 26% contra el 34% del trigo y el 38% del maíz. En otras commodities como el petróleo y el oro también se registraron mejoras pero de menor cuantía (11% y 23% respectivamente). En el gráfico de la portada puede seguirse la variación de los precios de los granos antes mencionados y también cabe destacar que las subas se produjeron durante el segundo semestre del año ya que, en todos los casos, el primer semestre fue negativo. La corriente alcista comenzó en el mes de julio cuando los temores por la ofertas de trigo a nivel mundial impulsaron fuertemente a los valores del cereal (que ese mes subió un 35%) quien a su vez contagió al resto de los productos (la soja en ese mismo período aumentó un 10%). Este último mes del año nos despide con una suba en los futuros más cercanos del 9,4% y con valores máximos: el jueves 28 la posición enero alcanzó los 505,5 dólares siendo el precio más alto desde finales de julio de 2008 cuando la cotización trepó hasta 512,8 dólares. El arbotante de la soja fue sin dudas el clima en Sudamérica. Lo que comenzó siendo un riesgo potencial tiene cada vez mayores probabilidades de ocurrir y a medida que transcurren los días y las condiciones no cambian se hace más factible la posibilidad de que la producción argentina no alcance los 52 millones de tn estimados por el USDA (y también el Ministerio de Agricultura de Argentina). Es más, ya comenzaron a revisarse las estimaciones tal como lo hizo Oil World que señaló que la cosecha rondaría entre 43 a 48 millones (desde los 52 millones previos) y otros analistas norteamericanos que la ubican en 48 millones (desde 49 millones). En ese sentido, también nuestra institución la fijó en 49,5 millones de tn. Si bien se observó un cierto avance en las siembras, son necesarias lluvias de entre 60 a 120 mm durante las próximas dos semanas para evitar mayores recortes en la producción. Por el lado de la demanda, si bien las cifras de exportaciones cayeron respecto a la semana anterior, se encontraron dentro de lo que esperaba el mercado y por ello el efecto fue neutral. No obstante, denota un factor que se mantiene firme detrás de los precios de la oleaginosa. Atravesando en la semana 17 del ciclo comercial, el total de compromisos representa el 81% del saldo proyectado por el USDA, superando al promedio del 67% de las últimas cinco campañas. China fue y será el principal motor de esta demanda, más allá de las medidas que está tomando para contener la creciente inflación.

Además, la firmeza de la soja viene siendo acompañada y reafirmada por las compras de los participantes especulativos, que buscan las commodities en general como alternativa de inversión. Esto se corrobora en el informe del USDA sobre compromisos de los operadores, que la semana pasada mostró un aumento del 4% en la cantidad de posiciones "long" de los participantes no comerciales. Durante gran parte del año, la posición neta fue mayormente comprada en sintonía con los crecientes precios que se fueron negociando. Además, se espera que los fondos continúen ingresando dinero especulativo al mercado lo cual contribuye a reafirmar la tendencia alcista, que ya viene marcada por los fundamentals.

Esta semana el volumen de negocios fue más bajo ya que como es costumbre en vísperas del nuevo año los inversores realizaron parte de sus ganancias y liquidaron algunas de sus posiciones generando cierta presión sobre los precios y apaciguando los ánimos alcistas. El jueves el futuro enero cerró a 501,9 dólares la tn, sin cambios respecto a la jornada previa y mostrando un aumento del 1,2% semanal. Más allá de estas correcciones, el leit motiv es y seguirá siendo por un tiempo el clima en Sudamérica, mayormente en Argentina, al menos hasta que comiencen a avizorarse las intenciones de siembra en Estados Unidos.