Finanzas

Mercados financieros continúan al alza, pero con mayor cautela


En los últimos meses, la decisión de la FED de mantener las tasas de interés en niveles extremadamente bajos ha llevado a los inversores a buscar activos con mejores perspectivas de rendimiento, como las materias primas y las acciones. Esto es lo que ha originado continuas subas en tales mercados (desde inicios de septiembre el DJIA avanzó un 11,2% y el Nasdaq Composite un 17,3%), tendencia alcista que volvió a observarse en las jornadas más recientes, aunque con un dinamismo menor.

Asimismo, la performance de los mercados financieros observada en las últimas semanas estuvo en buena medida influenciada por un episodio que ha tomado particular relevancia, la denominada "guerra cambiaria". La misma está asociada a la intención de distintos gobiernos del mundo de debilitar sus monedas (o contener su revaluación) para intentar acrecentar la competitividad de sus bienes en el mercado internacional.

Se sabe que las depreciaciones (si son reales) expanden la Balanza Comercial, al abaratar el precio en moneda extranjera de bienes locales e incrementar el de los bienes extranjeros expresados en moneda local. Estas prácticas se adoptan con el deseo de mejorar la situación externa del país.

Sin embargo, cuando la simple puja por evitar la apreciación se transforma en una "guerra cambiaria" (tal como se la ha denominado), los efectos perniciosos no demoran en salir a la superficie. Por definición, no todos los países podrán hacer caer el valor de sus monedas simultáneamente: siendo el tipo de cambio un precio relativo, si todas las monedas se desvalorizan en forma conjunta, no hay ganancias reales de competitividad. El panorama se tornaría mucho más complejo si, en una segunda instancia, los países refuerzan sus políticas proteccionistas.

En este contexto, los Estados Unidos y el FMI le exigen a China que deje apreciar su paridad, mientras que otros países emergentes, como Tailandia o Brasil, ajustan los controles de cambio para contener la sobre apreciación.

Al llegar el fin de semana, muchas expectativas están puestas en la reunión de los ministros de finanzas del G20 a realizarse en Corea del Sur, como anticipación de la cumbre en Seúl programada para los días 11 y 12 de noviembre. Se asume que allí se discutirá la propuesta estadounidense de poner un tope a los déficits y superávits del saldo de cuenta corriente en el 4 por ciento del PBI, sancionando a los infractores; la propuesta ha despertado fuertes críticas en países emergentes como China e India, así como también de Alemania y Japón. Está por verse si este mecanismo finalmente resuelve el conflicto.

La semana culmina con una ligera alza en los mercados financieros de referencia mundial, sin que por ello la misma haya estado exenta de fluctuaciones. Durante su transcurso, la expectativa estuvo concentrada en la publicación de los resultados trimestrales de las principales compañías norteamericanas, los cuales, con excepción de casos puntuales como los de Apple, IBM o Bank of América, no decepcionaron a los inversores. El Dow Jones Industrials se expandió un 0,63%, mientras que el Nasdaq C. lo hizo un 0,43%.

En el plano local, el momento de euforia que experimenta el Merval, que subió en 9 de las últimas 10 ruedas, continuó sin atajos hacia la obtención de nuevos máximos, finalizando este viernes en 2851,91 puntos (un alza del 4,25% semanal). Acoplada a los mercados externos, los inversores locales se vieron aliviados por los rumores sobre un nuevo plan de salvataje en Estados Unidos. Los principales sectores que motivaron la expansión fueron el energético (Pampa, con subas semanales del 5,64%) y el bancario (Galicia con un alza de 15,4% e Hipotecario con 15,9%). Nuestro mercado de capitales sigue de cerca lo que ocurre en Wall Street.