A diferencia de la semana previa, esta vez la soja no se apartó de los cereales sino que acompañó el camino bajista que prevaleció en el mercado y que se profundizó el viernes de la mano del maíz quien contagió al resto de los granos. Pero a pesar de esta tendencia negativa, el mes de septiembre terminó con un saldo positivo, acumulando subas mayores al 9% y mostrando el lunes pasado el precio más alto en lo que va del año. Si miramos el movimiento trimestral, el recorrido también es alcista, con subas de aproximadamente un 20%.

Por el lado de los fundamentals, durante esta semana se suavizaron ciertas preocupaciones por el lado del clima que redundaron en mejores expectativas en cuanto a la producción final tanto en Estados Unidos como en Sudamérica y esto debilitó en parte a los precios.

En relación a las potenciales producciones del Hemisferio Sur, las dudas giran en torno a la posibilidad de un año "Niña". En Brasil, el clima seco está demorando las siembras. Tal es el caso del estado de Mato Grosso, que es el mayor productor y el que normalmente inicia primero las siembras, donde los productores tuvieron que retrasar sus actividades por la falta de precipitaciones. Sin embargo, los pronósticos son favorables ya que se anticipan lluvias durante los primeros días de octubre. Además, se registraron buenos niveles de agua en los estados de Paraná y Mato Grosso do Sul y probablemente este año comiencen a sembrar primero.

En Estados Unidos, el clima acompañó durante el fin de semana para avanzar con la recolección, lo que pudo corroborarse en el informe del USDA sobre la evolución de los cultivos. Hasta el domingo, se llevaba cosechado un 17% de los cultivos, muy por encima del 5% del año previo. Si bien por debajo de lo esperado por los analistas, el ritmo de recolección es el mayor desde el año 2005. No hubo cambios respecto al estado, ya que un 63% de las plantas se encuentra en condiciones entre buenas y excelentes, igual que la semana previa.

El informe sobre stocks trimestrales que el USDA publicó el jueves tuvo un efecto bajista indirecto sobre la soja, ya que los nuevos datos provocaron una fuerte caída del maíz, al mostrar stocks muy superiores a los esperados. Esta disminución del cereal contagió al resto de los productos, y la caída se extendió incluso hasta el viernes. Para la soja en particular, el USDA informó que para el 01/09 las reservas eran de 4,1 millones de toneladas, apenas por encima de los 4,08 que en promedio esperaba el mercado.

La firme demanda fue lo único alcista de esta semana, al menos por el lado de los fundamentals, ya que en algunas jornadas fue la debilidad del dólar el sostén de todas las commodities. Así ocurrió el lunes, cuando todos los productos agrícolas mostraron fuertes subas impulsados por los mercados externos ante la caída del dólar. En el caso de la soja, los precios tocaron los 414 dólares, el valor más alto en lo que va del año.

Volviendo al único fundamental alcista, las exportaciones efectivas crecieron más del 50% semanal mientras que los compromisos subieron más del 60% alcanzando las 1.737.643 toneladas. De ese total, un 75% fue comprometido por China. Se dice que el país asiático adelantó compras anticipándose a los feriados de la semana próxima y por los cuales no estará en el mercado. Además, según el Ministerio de Comercio de China, las importaciones de soja alcanzarían los 4,9 millones de toneladas, siendo el segundo mayor nivel después del récord registrado en junio (6,2 millones de toneladas).

Como mencionamos al comienzo, el viernes la soja contagiada por el maíz cayó un 4,6% diario cerrando a us$ 388,38/ton. siendo el valor más bajo de los últimos 15 días, mientras que a nivel semanal, la variación también fue negativa y del 6,3%. Los subproductos tampoco se desligaron de la tendencia bajista y disminuyeron un 5,4% los futuros de harina y un 2,7% los de aceite.