Economía

Las cuentas del banco central


Según el balance del Banco Central al día 15 de diciembre las reservas internacionales llegaban a $ 191.887 millones cifra a la que hay que restar las cuentas corrientes en otras monedas (encajes de los depósitos en dólares) por $ 26.125 millones, restando $ 165.762 millones. A un tipo de cambio de $ 4,2823 = u$s 1, llegaban a u$s 38.709 millones. A esta cifra hay que deducirle la deuda con el Banco de Pagos Internacionales de Basilea por u$s 3.900 millones, por lo que restarían u$s 34.809 millones.

El pasivo monetario del Banco Central está compuesto por la Base Monetaria, por $ 212.390 millones y por los títulos emitidos por el BCRA (Lebac y Nobac) por $ 79.778 millones, totalizando $ 292.168 millones. Al tipo de cambio mencionado anteriormente, serían u$s 68.227 millones.

En el activo figuran títulos públicos por $ 128.045 millones a los que hay que restar las letras intransferibles, con vencimientos en el 2016, 2020 y 2021, por $ 110.159 millones. También figuran en el activo los adelantos transitorios al gobierno nacional por $ 60.130 millones y créditos al sistema financiero por $ 2.048 millones. A su vez, en el pasivo tenemos los depósitos del gobierno nacional y otros por 4.536 millones.

El Patrimonio Neto del BCRA figura con una cifra de $ 35.765 millones. Si tenemos en cuenta los importes mencionados más arriba, y dejando de lado otras cuentas menores, habría un desequilibrio patrimonial de alrededor de - $ 15.113 millones.

Durante el mes de diciembre, hasta el día 27, el Banco Central habría comprado un total de u$s 1.934 millones y las reservas (sin descontar los encajes de los depósitos en dólares y la deuda con el BIS) en u$s 46.371 millones. Si se descontasen los encajes de los depósitos en dólares (u$s 6.101 millones) y la deuda con el BIS (u$s 3.900 millones), las reservas reales serían de alrededor de u$s 36.370 millones.

Hay que tener en cuenta que varias razones explican que en el último mes el Banco Central haya sido comprador de la mencionada cifra de divisas, entre ellas: a) la elevada tasa de interés y las necesidades de las empresas por el fin de año, b) la obligación que pesa sobre las empresas aseguradoras de retornar al país sus inversiones en el exterior, c) las liquidaciones de las empresas mineras y petroleras, y otras.

De todas maneras, y a pesar de que esa oferta de dólares unida a la disminución de su demanda es provisoria, no existen dudas que las restricciones que hubo a la compra de divisas a partir de finales de octubre han evitado una baja mayor en las reservas del Banco Central.

Evolución anual de los agregados monetarios (al 16 de diciembre)

Base monetaria: tuvo un incremento de 36,1%.

Circulante: tuvo un crecimiento de 37,2%.

Billetes y monedas en poder del público: tuvo un incremento de 35,5%.

Préstamos al sector privado: tuvo un incremento de 49,1%.

Depósitos en el sistema financiero: tuvo un incremento de 29,7%.

Depósitos en dólares: tuvo una caída de 17,5%.

Préstamos en dólares al sector privado: tuvo un incremento de 30,9%.

M1 (billetes y monedas en poder del público + depósitos en cuenta corriente en pesos): tuvo un incremento de 30,5%.

M2 (M1 + depósitos en caja de ahorro en pesos): tuvo un incremento de 30,1%.

M3 (billetes y monedas en poder del público + todos los depósitos en pesos): tuvo un incremento de 31,2%

M3* (M3 + depósitos en dólares): tuvo un incremento de 25,4%.

Como se puede observar en las cifras anteriores, la inyección monetaria permite explicar una inflación de precios de alrededor del 20 al 25%. Va a resultar difícil disminuir esas tasas de inyección monetaria dado que desde hace un tiempo la situación fiscal está en déficit y, por otra parte, la disminución de reservas en el Banco Central hace que la entidad busque comprar divisas para que no se debiliten sus reservas.